El Real Madrid defiende el liderato al que se aupó la pasada jornada, con el triunfo en el clásico disputado en el Santiago Bernabéu ante el Barça, en el Benito Villamarín donde el Real Betis aprieta mucho pero vive en un momento de inestabilidad, más cerca del descenso que de Europa.

El partido cierra hoy la jornada y el equipo de Zinedine Zidane saltará al césped conocedor del resultado de su eterno rival ante la Real Sociedad, precisamente el último rival al que ganó el conjunto de "Rubi".

El técnico catalán, otra vez cuestionado por los resultados que le separan de los objetivos europeos marcados para esta temporada, ganó ese partido por 3-0. Desde entonces, el Betis ha perdido ante Valencia, Barcelona y Getafe y empatado frente a Eibar, Leganés y Mallorca, además de ser eliminados de la Copa del Rey por el Rayo Vallecano.

Para el Real Madrid es la primera de las finales ligueras, ya que su objetivo es no bajarse ya del liderato en búsqueda del título liguero. Una defensa del primer puesto que se inicia con bajas de última hora, más allá de las de Hazard y Asensio.

El duelo ante el Betis se lo perderá uno de los jugadores más enchufados en este momento de la temporada, Isco Alarcón, por una lumbalgia. Un problema para Zidane que se suma a la baja de Carvajal, con gripe y la ausencia de Nacho y que condicionarán su defensa, en la que Militao ejercerá de lateral derecho y también volverá Mendy.

En la lista blanca llaman la atención las entradas de Rodrygo y de James, siendo poco probable la partida en el once de ambos.

Por su parte, el Betis cuenta con todos sus hombres para el envite ya que Barta cumplió su partido de sanción en Mestalla y Diego Lainez y William Carvalho han vuelto a entrenar. Eso sí, el once de Rubi es todo un misterio.