El Moralejo Selección salió escaldado de su visita a Villa de Aranda donde el segundo clasificado se impuso con absoluta rotundidad (34-18) al filial zamorano.

Con varias bajas notables en su formación, el cuadro dirigido por Ricardo Margareto fue incapaz de encontrar la fórmula para llevar las riendas del envite. Además, como ocurriera en el encuentro de ida, Mario (exportero pistacho) se erigió como un factor determinante para inclinar la balanza en favor de los burgaleses.