Comienzo de la segunda vuelta para un Caja Rural obligado a reaccionar si quiere evitar el descenso de categoría. Trece finales que dan su pistoletazo de salida en Gijón ante un rival irregular capaz de lo mejor y de lo peor.

Seis victorias en siete partidos como local avalan al conjunto asturiano como uno de los equipos más complicados de batir en su feudo. Racha difícil de romper para un conjunto zamorano que buscará dar la sorpresa y obtener su primer triunfo como visitante.

El Noxtrum Gijón Basket es un conjunto con mucha veteranía que sabe gestionar a la perfección el tempo de los partidos. Depende mucho de sus convocatorias, ya que no siempre dispone de todos sus efectivos, si bien es un problema que apenas sufre cuando actúa como local. Motivo por el que es probable que cuenta con Alex Rubiera, Fernández Noval o Jorge Escapa, los mejores hombres de un plantel de muchos quilates.

Los zamoranos, que ya podrán contar con sus dos nuevos refuerzos, viajan con la necesidad de empezar a sumar y confían en encontrar su mejor versión gracias al importante impulso que han supuesto los últimos fichajes.

Juanma Robles y Xabi Zubeldia continúan siendo baja, aunque se desplazaran con sus compañeros. Jugadores entre los que se encontrará Juan Colino, quien ya tuvo su estreno anotador en el último partido y que volverá a completar una convocatoria en la que varios efectivos acuden con dolencias al envite. Es el caso de Fabio Valdivia, que arrastra molestias en el talón de Aquiles; o Kilian Riverol y Aleix Pujadas, que tampoco han podido entrenar con normalidad esta semana por diversos motivos.

Una victoria para empezar la segunda vuelta sería una enorme inyección de moral para un equipo necesitado de buenas noticias en forma de triunfos.