El Benavente encontró un rival muy duro en Astorga

Los tomateros que viajaron hasta Astorga con solo 13 efectivos acabaron sucumbiendo ante la superioridad de un equipo llamado a luchar por los puestos de acceso a la Segunda División B.

Hasta el municipal de "La Eregudina" se desplazaba en la tarde noche de ayer el CD Benavente para enfrentarse al Atlético Astorga en un partido pactado entre ambos conjuntos para mantener el ritmo competitivo en un fin de semana en el que las dos escuadras no tienen compromiso liguero. Un partido al que los de Santi Redondo llegaban con ganas de demostrar ser uno de los equipos más en forma de la Regional Aficionados, pero que no pudieron hacer nada ante la superioridad de los maragatos.

Una superioridad numérica, ya que los rojillos viajaron con numerosas ausencias a la localidad leonesa. Únicamente 13 jugadores disponibles para el entrenador tomatero que tuvo que inventarse un equipo casi nuevo para poder competir. Y así lo hizo durante la primera media hora. Es verdad que el dominio lo ejercían los locales, pero el Benavente se conseguía defender ante un equipo muy superior. La tuvo Adrián Turiel en la primera mitad con un duro disparo de falta que obligó al portero local a intervenir y enviar el balón a córner en la que sería la acción más peligrosa de los rojillos. Cercano el cronómetro a la media hora de juego, un córner a favor de los locales terminaba con el balón introduciéndose en la portería del Benavente después de que tocara en un jugador visitante. Una jugada de mala fortuna que ponía el primer gol maragato en el marcador. El gol sentó como una losa sobre los jugadores benaventanos que sufrieron en los últimos minutos de la primera mitad ante el ritmo y la verticalidad de los verdes. En el minuto 40, un balón a la espalda de la defensa dejaba solo a un delantero maragato que no perdonaba ante la salida de Jesús y en la última jugada de la primera mitad, una internada del lateral zurdo del Atlético Astorga terminaba con un fuerte disparo que pondría el tercer tanto local.

Tras el descanso, Santi Redondo recompuso su formación. Dio entrada a Yeray en el carril zurdo y pasó a defensa de cinco, lo habitual en liga. El paso de los minutos y el marcador a favor dejaban ver un juego alegre y cómodo de los locales, que junto a la entrada de hasta seis nuevos jugadores en la segunda mitad no hacía peligrar el partido en ningún momento. Aún así la tendría Javi para anotar el tanto del honor rojillo. Nuevamente como ocurriese en la primera mitad los últimos minutos de juego pasaron factura en las piernas de los tomateros que veían cómo hasta en dos ocasiones más los jugadores del Atlético Astorga celebraban un nuevo tanto.

Al final, resultado de 5-0 que sirve para no perder comba durante el parón de esta semana y permite afrontar el siguiente encuentro con garantías.