Buscaba el Zamora Rutas del Vino echar el cierre al Ángel Nieto en este 2019 con buenas sensaciones y lo logró. Lo hizo plantando cara a BM Benidorm, décimo clasificado de la Liga Asobal, y dejando su eliminatoria de tercera ronda de Copa del Rey abierta de cara al partido de vuelta del próximo sábado en tierras levantinas. La pena, la única a lamentar ayer, fue que los pistacho rondaron la victoria y al final cedieron por 29-31. Un marcador ajustado, fiel reflejo del partido y fruto del buen hacer de jugadores pistacho como Ramiro, Sarasola o Miguel Guarido.

Con circulaciones de balón largas por ambas partes, el partido de ida arrancó con intercambio de goles entre el Zamora Rutas del Vino y el BM Benidorm. Un guión fruto del acierto en el lanzamiento exterior de los visitantes y de la primera exclusión levantina, en el minuto uno, que dio aire a los zamoranos antes de que Pabán pusiera el 2-4 y empezara a distanciar a los suyos. BM Benidorm no quería un duelo ajustado y no dudó en fusilar a Barrientos con buenas posiciones desde la frontal. Un planteamiento al que los de Leo Álvarez trataban de responder con penetraciones. Acciones menos claras que las de su rival pero con buen final, a veces desde los siete metros con Ramiro como ejecutor, que mantenían el choque más o menos equilibrado.

Ante la potencia de fuego enemigo, el técnico del Rutas del Vino decidió introducir a Guarido bajo palos con 4-6 a los ocho minutos de juego. El joven meta respondió a la confianza y dos de sus paradas permitieron a Guille y a Mouriño igualar la contienda tres minutos después.

El empate no duró más que unos segundos en el marcador. No así la sensación de equilibrio de fuerzas sobre la pista. Al menos hasta que Leonardo Vial dejo muestras de su talento bajo palos. Sus reflejos secaron la anotación local lo suficiente como para que BM Benidorm atravesara el ecuador del primer acto con las riendas del choque en su poder (7-9, m. 16).

El parcial negativo del Zamora Rutas del Vino tuvo como aspecto opuesto la intervención de Sarasola. El gallego aportó dos goles claves para evitar una tempranera rotura de partido en favor de un cuadro visitante que encaró la recta final de los primeros treinta minutos con un único gol de renta tras un tiro excelso de Jortos (9-10).

La entrada del capitán y las intervenciones de Miguel Guarido, aplaudido por sus enormes reflejos, impulsaron al cuadro de Viriato en la antesala del paso por vestuarios. Tal fue la reacción pistacho que, por primera vez en la contienda, el marcador ponía por delante a los de Álvarez (11-10). Una situación que BM Benidorm trató de atajar con un tiempo muerto pero, en el Zamora Rutas del Vino, ayer había energía y soluciones. Quizá por la ilusión de jugar la Copa del Rey, por la frescura de Sarasola o por el descaro de Paez... o porque en el arco había un canterano ofreciendo una lección magistral sobre la labor de un portero. Fuera por todo ello o por otro motivo cualquiera, los zamoranos alcanzaron el descanso con 17-15 a su favor. Un guarismo ilusionante para los aficionados que no quisieron perderse el duelo pese a jugarse un martes por la noche.

Tan vibrante resultó el primer acto que, el asueto, pasó en un suspiro para dar paso a una segunda parte que arrancó de forma muy diferente. Y es que, en apenas dos minutos, BM Benidorm igualaba la contienda con un parcial de 2-0 que acabó por romper Iñaki. Un gol que no evitó que los levantinos culminaran su remontada con un tanto de Pabán (18-19, m. 35).

Pese al frío regreso a la pista, el Zamora Rutas del Vino no le perdió la cara al partido. Eso sí, se veía un punto por debajo de su rival que, además, no dudó en sacar provecho de su primera superioridad numérica por exclusión de Dalmau. Un problema que no impidió a los zamoranos mantener igualado el envite gracias a buenas acciones de Mouriño y un siete metros detenido por Luis Posado.

Con estas circunstancias, regresó el intercambio de goles y la alternancia en el marcador. Al principio, con los zamoranos dominando cuando el encuentro transitaba fuera de los cauces del empate; después con los visitantes al frente pese a los latigazos del siempre fiable Ramiro y su empeño por mantener el suspense a falta de quince minutos para el final (24-24).

El desenlace no desmereció a lo visto anteriormente. Fernando y Horcajada ponían por delante al Zamora Rutas del Vino a falta de diez minutos y BM Benidorm respondía tirando de la clase de Folqués y Simonet recuperando la iniciativa poco después (26-27, m. 53). Podía ganar cualquiera el primer asalto, el resultado iba a depender de los detalles. Y, en ese mundo, el talento acaba por relucir. Como era de esperar, la indudable clase de los jugadores del BM Benidorm imperó en el tramo final ante un cuadro de Viriato que, yendo por detrás, se precipitó en un par de acciones y no consiguió volver a ponerse por delante pese a dos grandes tantos de Jaime.

Instantes en los que, viéndose con un tanto arriba en el luminoso y balón en la mano, los visitantes tiraron de pizarra para sentenciar su triunfo con un tiempo muerto y posterior jugada de tiralíneas para poner el 29-31 final. Un marcador que otorgó el premio del triunfo a los levantinos y su mayor capacidad pero que deja las espadas por todo lo alto de cara al choque de vuelta del sábado.