Luanco, Área 11

El Zamora CF sigue sin ser capaz de enlazar victorias, a pesar de que ayer en Luanco ante el Marino mereció sumar los tres puntos o, como mínimo, traerse algo positivo de tierras asturianas, lo que hubiera supuesto más oxígeno para una plantilla que se está mostrando muy poco regular en cuanto a resultados se refiere. Los rojiblancos tuvieron más ocasiones que los anfitriones de este duelo, sobre todo en una primera parte en la que Sergio Sánchez apenas tuvo que aparecer, pero los locales acertaron rápido en la reanudación y maniataron durante muchos minutos a un equipo zamorano al que el tanto en contra en el minuto 50 le pesó como una gran losa, un tiempo en el que los asturianos pudieron incluso ampliar el marcador a su favor.

En la recta final, el Zamora volvió a despertar y a luchar por rascar al menos el empate, pero en la mejor ocasión, que fue una falta botada por Nacho Matador, el balón se estrelló contra el poste.

La de ayer era una gran oportunidad para dar un golpe en la clasificación y es que a la hora de comienzo del encuentro en Miramar ya se conocían los resultados de rivales directos y no eran malos para el Zamora, salvo por el sorprendente triunfo del Guijuelo en casa del Tenerife. El resto, el colista (ahora con 17 puntos) se impuso al Alcalá, que se mantiene con 26 puntos, mientras que el San Sebastián de los Reyes y el Rayo B firmaron las tablas, algo que impide que uno de los dos se escape. La derrota devuelve al Zamora CF a los puestos de descenso directo, a tres de la promoción y de la zona de permanencia. Por lo que respecta al encuentro de ayer, para el que Roberto Aguirre convocó a 17 jugadores, hubo sorpresas tanto en la lista definitiva de 16, de la que se quedó fuera Jorge Hernández, como en el once inicial, puesto que el asturiano apostó poner a Granada, Lusamba y Javi Ramos desde el primer minuto, mientras que Dani Palacios, Dani Hernández y Javi Rodríguez (que en las últimas citas han sido titulares indiscutibles) esperaron su oportunidad desde el banquillo y, de hecho, estos dos últimos futbolistas trataron de ser un revulsivo avanzado el segundo tiempo pero nadie fue capaz de batir la portería de Rafa Ponzo, y eso que las ocasiones a balón parado se multiplicaban a favor de los zamoranos.