El Zamora CF tuvo que echar mano de su oficio en la segunda parte para contener a un Cristo Atlético que fue el equipo que más ocasiones le ha creado esta temporada a un líder que sigue sin conocer la derrota sumando catorce triunfos consecutivos aunque ayer, la tradicional solidez defensiva que muestra el equipo de David Movilla quedó olvidada y los palentinos estuvieron a punto de llevarse algo positivo de su visita al Ruta de la Plata.

El Zamora CF hizo méritos en ataque para haberse llevado la victoria de forma cómoda creando muchas ocasiones claras de las que tan sólo entraron dos a lo largo de los 90 minutos, pero atrás, los rojiblancos permitieron que los habilidosos delanteros del Palencia hicieron y deshicieron a su antojo y tan sólo el oficio de Jon Villanueva bajo los palos impidió un resultado más positivo para los visitantes que, seguramente, cuajaron ayer el mejor partido de la temporada pero salieron derrotados.

El Cristo Atlético saltó al campo sin ningún tipo de complejos, lo que siempre es arriesgado ante el Zamora, y ya en el primer minuto Pablo combinó con Edu que se plantaba ante el portero pero Guille, llegando desde atrás, le arrebataba el balón. El Zamora es un rival muy complicado para que cualquier rival intente tutearle y no habían transcurrido cinco minutos de juego cuando Guille Perero recibía dentro del área y lanzaba un disparo raso y lejos del alcance de Miguel para marcar el primer gol del partido.

No solo llegaba la mala noticia del gol en contra sino que el Palencia sufría acto seguido la lesión de Abajo que le obligaba a abandonar el terreno de juego sustituído por Blanco. Y sin tiempo para encajar los disgustos, Rubiato recibía en la frontal del área y se escapaba de Abel que no tuvo más remedio que agarrarle, lo que le costaría la tarjeta amarilla.

Todo pintaba muy mal para los de Rubén Gala, pero en la siguiente jugada, Alvaro se escapó por la derecha y su centro lo recibió Edu para marcar el gol del empate con un tiro colocado al segundo palo. Todo cambió en un momento porque el Cristo se creció y a punto estuvo de darle la vuelta al marcador en un disparo de Blanco desde cerca que repelió el larguero. Respondió el Zamora pero ni Sergio García ni Guille Perero marcaron desde cerca.

El Cristo siguió tuteando a su rival y poco después era Álvaro el que disparaba casi sin ángulo y el balón salía un poco alto. Pero la más clara la tuvo de nuevo Álvaro que recibió un pase en profundidad de Adri, se plantó ante el portero Jon Villanueva que rechazó su disparo cuando ya se cantaba el gol.

Perdonaron los palentinos y el Zamora volvió a lo suyo con un centro de Escudero a Guille que remató de cabeza y Miguel del Río realizaba una gran intervención que premió con aplausos la afición zamorana que le vió formarse como futbolista. No hubo un segundo aviso y el Zamora no perdonó en la siguiente, en una escapada por la derecha de Sergio García que se la puso en el área pequeña a Escudero para que marcase el 2-1 a placer.

Y todavía tendría otra el Cristo antes del descanso en una combinación entre el ex del Zamora CF Javi Bueno que no pudo aprovechar Alvaro ante el portero.

David Movilla no estaba contento con el funcionamiento de su defensa y decidió sacrificar en los vestuarios al central Piña, poniendo en el campo a Coque tras el descanso para que Asiel y Raul Avarez formasen la pareja de centrales. Rubén Gala no cambió nada y el Cristo Atlético siguió a lo suyo, sin arrugarse lo más mínimo.

Y el Zamora volvió a la carga dispuesto a sentenciar cuanto antes y a los 2 minutos de la reanudación del encuentro, Escudero remató de cabeza una falta para que Miguel Del Río pudiera lucirse de nuevo ante sus paisanos. Rubiato también buscaba el gol de cabeza pero el balón salía alto, y Asiel ejecutaba una baselina, con Miguel adelantado, que tampoco quiso entrar mansamente en la portería.

Sergio García disparaba alto en una contra, mientras Jon se empleaba a fondo en sendos lanzamientos de los palentinos Adri y Alvaro. El partido seguía muy abierto y podía caer de cualquiera de los dos bandos. Movilla dio entrada en el campo a Dani Hernández buscando ataque para sentenciar, mientras Gala ponía a Vallecillo.

Y el Cristo Atlético seguía buscando el empate con otro remate de cabeza, de Alvarito que envió a córner Jon. Incluso el árbitro anulaba un gol de cabeza a Abel en una falta lateral en una decisión que fue muy protestada por el equipo palentino.

Y todo quedó decidido a cinco minutos para el final cuando Obispo era expulsado cuando cortó en falta una escapada de Rubiato que se quedaba solo ante el portero. Además el portero Miguel también vio la roja con el tiempo concluído por falta sobre Sergio García que se iba solo hacia la portería. Triste regreso para el guardameta zamorano en su regreso a casa. En todo caso, la afición le dedicó una cálida ovación de defensiva cuando se retiró del campo tras dejar su camiseta y los guantes a su compañero Burgos.

Con esta victoria, el Zamora incrementa su ventaja en el liderato aunque con un partido más que sus rivales, tras la jornada de descanso del Burgos Promesas, y el tropiezo en casas ante el Bembibre, del Numancia B (1-2).