La selección francesa de baloncesto femenina volvió a sacar este domingo músculo con su vitoria 58 a 65 ante el combinado español al mostrar más garra en un tercer cuarto que, a la postre, fue determinante en el segundo encuentro entre ambas selecciones en menos de dos días.
La igualdad entre las dos selecciones se hizo de nuevo patente en el Torneo Provincia de Palencia, así como el carácter de prueba de la cita, que se ha podido comprobar desde el inicio del partido. La selección francesa, que también ganó a España el pasado viernes en Zamora, empezó mucho más centrada, haciendo valer su juego interior y su fortaleza en defensa.
Mientras, España no encontraba los recursos ofensivos y cometía muchas imprecisiones, lo que provocó un parcial de 4-15 en apenas seis minutos de juego.
Como respuesta, el técnico español, Lucas Mondelo, reaccionó moviendo el banquillo y con un tiempo muerto con el que consiguió mejorar en dos aspectos: la movilidad de la defensa en zona 2:3, arriesgando al robo del balón, y la velocidad en ataque.
Con esa dinámica y la mejora reboteadora, acabó el primer cuarto (13-20) y empezó el segundo, en el que las españoles le dieron la vuelta al marcador, llegando a conseguir una ventaja de cuatro puntos, para llegar al descanso con 31-30. Un resultado que dejaba las espadas en todo lo alto.
El tercer cuarto resultó clave en el devenir del encuentro; España empezó fría y cometió los mismos errores que al inicio del partido, con muchas imprecisiones y falta de eficacia en el lanzamiento tanto interior como exterior.
Por su parte, Francia se apoyó en su juego interior y en el control del juego de sus dos jugadoras más resolutivas, Vukosavljevic y Ciak, para anotar de forma constante y alcanzar los 15 puntos de ventaja. Una renta importante.
La selección española, con más intención que acierto, consiguió estabilizar el partido y, ya mediado el último cuarto, reducir un poco la desventaja con la firme intención de regalar al Municipal de Palencia un final igualado. Pero, pese al empuje del equipo y de la afición, Francia supo mantener el control de la situación para anotarse la segunda victoria de la concentración.
