El Zamora encadenó su octava victoria tirando de oficio ante una combativa Virgen del Camino que se ha hecho fuerte en su domicilio durante esta temporada. El 1-4 final no refleja el discurrir de un partido muy trabado en el que tan sólo en la segunda parte el Zamora pudo demostrar su superioridad. Sin embargo, los de David Movilla, supieron ejercer su papel con paciencia ante un rival que acusó la baja tempranera de Igor.

Los primeros minutos demostraron que la lluvia iba a ser protagonista del partido. Ninguno de los dos equipos conseguía hacerse fuerte en Los Domínicos y manejar el balón con comodidad. Fue a partir del cuarto de hora, cuando el Zamora empezó a tomar el pulso a un choque en el que no encontraba su mejor versión.

Los dos bloques trataban de llegar con balones largos y, sobre todo, de no perder la posición. La primera llegada, eso sí, la protagonizó La Virgen a balón parado ante un Jon muy atento que abortó la escaramuza local. Sin embargo, en el ecuador de la primera parte, la fortuna comenzó a sonreír al líder de la categoría, cuando se retiraba por molestias musculares Igor da Sousa. El veteranísimo delantero carioca, pasa por ser una de las atracciones de este inicio de temporada, y ayer podía ser un absoluto referente ofensivo para los suyos.

Ante tal contratiempo, La Virgen quedó a la espera de alguna ocasión aislada que les condujese sobre la portería de Jon Villanueva. Sin embargo, quien se la encontró pasada la media hora, fue Valentín. El delantero visitante demostró que sí se puede ser profeta en tu tierra anotando dos goles. El primero de ellos llegó tras un error defensivo en el que el 9 se mostró atento, veloz y con sangre fría para abrir el marcador. No supo cómo reaccionar al gol el once de La Virgen que viajaba a la expectativa frente a los jugadores de David Movilla.

La segunda parte tuvo muy poco que ver con los primeros cuarenta y cinco minutos. Se abrió La Virgen en busca del empate y aprovechó el Zamora para dejar el choque visto para sentencia. Y es que el liderato también se gana en campos como Los Dominicos ante rivales como La Virgen y en partidos como el de ayer donde toca ser más efectivo que estético.

La primera llegada del segundo acto la tuvo Guille tras una maravillosa internada de Sergio García al área. Acto seguido, era Valentín quién intentaba anotar a la contra.

Movía el banquillo Roberto Carlos buscando mayor posesión y participación de los atacantes. Durante 5 minutos, se adueñó del esférico Dani Alonso con hábiles combinaciones interiores. Sin embargo, también el banquillo visitante supo leer ese contexto y abortarlo.

A partir de ahí el Zamora olió sangre y decidió cerrar el encuentro. Primero con una nueva internada de Sergio García para que Guille rematase al larguero dentro del área. Fueron demasiados avisos hasta el 0-2 de Escudero. Un balón al área, que el atacante remató para que se luciese Isma en primera instancia. Pero la pelota blanda se coló en la portería.

Acto seguido, con La Virgen a punto de tirar la toalla, llegó el tercero de la tarde, obra de nuevo de Valentín. Esta vez fue con un balón largo en el que el delantero ganó la espalda a la defensa y batió sin complicaciones al guardameta. El futbolista leonés pasa por un momento dulce y esta dispuesto a prolongarlo lo máximo posible. No tardó en llegar el 0-4, esta vez con muy bella factura de Rodri Escudero para poner el broche con una vaselina a una jugada habilitada por sus compañeros.

Restaba un cuarto de hora en el que poco habría que ver sobre el campo de Los Dominicos. El Zamora decidió guardar esfuerzos para mejores batallas y La Virgen trató de estirarse para poder ofrecer algo a su parroquia. Los de Roberto Carlos han firmado 10 goles en contra en sus últimos dos partidos tras un intachable comienzo de temporada. Para la entidad verdiblanca la única alegría llegó con el excelente lanzamiento de falta directa del berciano Porfirio Puente ante el que nada pudo hacer Jon Villanueva y que supuso el gol del honor para los leoneses.