Iñaki Gómez atendió a los medios de comunicación en el Ángel Nieto días antes del encuentro que el Zamora Rutas del Vino disputará en ese mismo escenario ante Handbol Bordils. Un choque "importante" según catalogó el zamorano, que confía en que si los pistacho siguen "trabajando como hasta ahora" acabarán por sumar los puntos que se le han escapado en jornadas anteriores.

El primera línea del cuadro de Viriato no negó que, tras dos partidos perdidos, la contienda del sábado "es un partido muy importante". "Lo afrontamos en posiciones de descenso y en una situación paradójica según venía siendo la trayectoria del equipo", señaló, reflexionando sobre la dificultad de los últimos envites y el buen papel zamorano: "Nos hemos enfrentado a dos equipos recién descendidos de la Liga Asobal y aunque los perdimos bien pudo caer la moneda de otra forma y acabar en empate o en victoria para nosotros". Gómez afirmó que, a nivel particular, regresó "con muy buenas sensaciones de Pontevedra por el compromiso y la entrega de mis compañeros" y apuntó que el esfuerzo y el buen juego son cosas que "no se pueden olvidar".

En cuanto a esas derrotas, Iñaki Gómez también comentó que las circunstancias externas han influido también notablemente para la situación clasificatoria del Zamora Rutas del Vino. "Hemos jugado contra tres rivales que están en fase de acenso y también hemos tenido algo de mala suerte en cuanto a lesiones", indicó, apostillando: "La portería estaba trabajando bien y con buenos resultados en ese trío que conforman Barrientos, Posado y Admella pero, este último, no ha podido reaparecer hasta el otro día. Además, Octavio se lesionó en el primer partido y, para mí, estaba en uno de los mejores momentos físicos y mentales de su carrera. Como también Raúl Maide, que estaba sumando buenos minutos y aportando bastante al equipo. Ambos estaban haciendo una pareja excelente en la dirección. Todo eso se ha juntado y estamos en descenso". Por todo ello, afirmó que el choque ante Bordils es "Un duelo importante pero que se debe afrontar con los pies en el suelo, con tensión pero sin olvidar que el trabajo está siendo bueno".

En cuanto a su inesperado rol protagonista en el equipo actualmente, Iñaki afirmó que él está "cómodo en cualquier posición" y que no le importa ocupar el puesto de central y "llevar el peso del equipo los minutos que el entrenador crea necesario". "Para mí es una alegría poder estar en la pista porque, como siempre digo, estos últimos años son "de gratis". Nadie podría haberme dicho que íbamos a llegar tan lejos y tan arriba, por ello es toda una satisfacción poder saltar a la pista con la responsabilidad que sea y cumplir con lo que necesita el equipo y ayudar en todo lo posible", comentó, afirmando que se siente "tranquilo y cómodo", además de "muy respaldado por el grupo y el técnico". Buenas sensaciones que contrastan con las que tiene cuando echa la mirada la grada. "Viendo a Octavio y a Raúl en la grada, sus caras, eso me toca el corazón y me duele mucho verlos allí", confesó.

Para el primera línea zamorano, Bordils es sin duda un mal enemigo a la hora de intentar recuperar la buena senda trazada por el Zamora Rutas del Vino en el Ángel Nieto a lo largo de meses anteriores. "Llevamos jugando con ellos desde 2013 cuando subimos a Plata. Entonces nos parecía un equipazo y, desde entonces, todo han sido encuentros muy duros e igualados", recordó, señalando que son un conjunto que "corre mucho, tiene buena portería y logró empatar la pasada semana en Alcobendas". Aun así, Gómez tuvo a bien rememorar lo ocurrido hace años en el primer duelo entre ambas formaciones en la División de Honor Plata. "Recuerdo que el primer año jugamos en estas mismas fechas contra ellos y nos ganaron con claridad en el Manuel Camba dejándonos en una situación similar a la de ahora. Luego, ese año acabó con ascenso directo a Asobal", destacó, extrapolando de ello una lección importante para el presente: "Tenemos que intentar transmitir a los recién llegados que la buena dinámica de trabajo de estos meses o lo unido que está el grupo acabará por tener premio. Para ellos es duro porque se ven trabajando bien, entrenando bien y en puestos de descenso. Es una situación tensa para ellos y hay que transmitirles, como a todos, que hay que pensar en el siguiente partido y en seguir trabajando así porque si se sigue en esa línea caerán los puntos de nuestro lado".