Desde hace mucho tiempo, quizá desde que el ya retirado David Sánchez se impuso en el Campeonato de España Júnior, un tenista zamorano no lograba imponerse en una cita de prestigio a nivel nacional. Una sequía de grandes éxitos que Cristina Jañez Chaguaceda consiguió romper en Béjar, localidad que acogió una vez más una de las paradas del circuito nacional Warriors Tour.

La victoria de la benaventana es de altos vuelos. No solo por el caracter del torneo, perteneciente a uno de los dos circuitos nacionales que se disputan hoy en día (el otro es el Rafa Nadal tour) o porque la figura de un ilustre como Juan Carlos Ferrero esté ligada a la organización del mismo, también porque al XVI Open Warriors Tour Ciudad de Béjar acuden las mejores raquetas españoles de cada categoría. Jóvenes promesas que se desplazan cientos de kilómetros para poder ganar los puntos suficientes que les permita disputar la edición máster de esta competición una vez que todas las pruebas celebradas por España tocan a su fin.

Jañez, cuya temporada está siendo para enmarcar, no partía en Béjar como una de las favoritas al título. Sin embargo, no por ello se dejó intimidar y desde su prometedor debut hasta la gran final, hizo gala de un tenis sólido con el que superó ronda tras ronda.

La benaventana empezó a perfilar su triunfo en Béjar en octavos de final frente a la catalana Tatiana Cantos. Una rival complicada a la que superó con claridad en el primer set (6-1) y que vendió cara su derrota al ceder en el segundo por un ajustado 7-5.

Este triunfo permitió a Cristina Jañez ganar gran confianza y firmar toda una exhibición en cuartos de final frente a la isleña Laura Tapia. La de Tenerife fue incapaz de superar a la benaventana, que entró en semifinales ganando por un doble 6-1.

En la penúltima ronda, Jañez medía fuerzas con las principales favoritas y la benaventana demostró estar en un momento brillante ante ellas. No solo superó en semifinales la dura prueba que supuso la castellonense Maite Bou, a la que derrotó tras un intenso partido con 7-6 (5) y 6-3 como resultado, también venció la gran final para hacerse con el título. Un duelo decisivo en el que se enfrentó a la madrileña Coral Valle, a la que ganó por 6-2 y 6-3.

Con esas dos victorias, Cristina Jañez Chaguaceda no solo se imponía en una cita de gran calibre y daba continuidad a sus éxitos en la Tono Páez 2019, también demostraba su talento al lograr el trofeo ganando en pista a tres de las cuatro primeras cabezas de serie del mismo. Un éxito loable, raramente visto en el tenis zamorano y que pone el nombre de la benaventana en el panorama nacional.