El club rojiblanco Zamora CF solicitará en las próximas horas a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ocupar la plaza que ha dejado vacante en Segunda B el CF Reus por el descenso administrativo de la entidad, al no cumplir los requisitos económicos conforme al reglamento. Un esfuerzo considerable por el que el equipo gestor hará frente a los 630.000 euros que solicita la RFEF, cantidad que deberá abonar el club interesado en la compra de la vacante rojinegra.

Para llevar a cabo el proceso de elección de los equipos que optan a subir a Segunda División B vía legal, la RFEF se ha acogido al artículo 194, ya que el artículo 105 le otorga las competencias de ser la Junta Directiva de la Federación la que determina el modo y la forma en la que se cubrirán las vacantes. Dicho de otra manera, se reserva el derecho de decidir quién será el sustituto del Reus.

En la pugna por optar a la plaza de Segunda B se encuentran otros clubes como el Hospitalet, el Peralada y el próximo candidato sería el que tenga mejor coeficiente de los equipos que perdieron la fase de ascenso de Tercera División del resto de España. Como última opción, la plaza podría ser ofrecida a los equipos de Segunda B que descendieron en el anterior ejercicio.

Una plantilla para competir en Tercera División

El órdago realizado por la directiva del Zamora CF sorprende por muchas cosas, evidentemente el montante económico de la plaza es el primero de los detalles que salta a la vista, sin embargo no es el único. Hay muchas preguntas sin resolver y muchos aspectos que parecen entrar en contradicción con esta decisión del club rojiblanco, una de ellas es la plantilla de la que dispone David Movilla para competir en una liga del nivel de la 2ªB. La dirección deportiva, liderada por César Villafañe, ha configurado un plantel para disputar el ascenso a Segunda División B -muchos de ellos provienen de equipos de Tercera- y parece complicado pensar que con una escuadra de dicho nivel se pueda competir contra equipos del nivel del Sabadell, el Hércules, Gimnastic o el filial del Villarreal. Qué pasaría con algunas de las nuevas incorporaciones o renovaciones y si llegarían refuerzos de mayor nivel es otra de las muchas preguntas que nos deja esta sorpresiva iniciativa del club liderado por Víctor de Aldama.

Viajar a Cataluña cada 15 días

Cabe destacar que si finalmente el Zamora se hiciese con la plaza del Reus (ubicado en el Grupo III de Segunda División B), la plantilla rojiblanca debería asumir un viaje cada 15 días hasta tierras catalanas o valencianas toda vez que el grupo III acoge a los clubes de dicha zona geográfica. La formación local tendría que enfrentarse a un desplazamiento importante al menos dos veces al mes, un hándicap al que no tendrían que enfrentarse el resto de equipos rivales, cuyos traslados serían considerablemente inferiores y asumibles. A la paliza física de los viajes habría que tener en cuenta el incremento económico que supondría esta coyuntura, ya que el gasto al que asciende un viaje a León, Burgos o Valladolid no es equiparable al de un traslado hasta Lleida o Alicante.

Apoyo de la afición

El Zamora CF necesita más que nunca el apoyo de la afición. Unos seguidores que han mostrado de forma ejemplar, su fidelidad a lo largo de la campaña anterior en Tercera y que tienen ante sí la ilusionante oportunidad de ver a su equipo en la categoría de bronce del fútbol español. El conjunto rojiblanco se convirtió la pasada campaña en uno de los mejores equipos como local de todo el campeonato y la base de esa fortaleza, residió en el aliento de cada uno de los seguidores que con su confianza, llevaron al equipo en volandas. El Ruta se convirtió en un auténtico fortín dentro del Grupo VIII de la Tercera División, rozando los 7.000 espectadores y ahora más que nunca esperamos mantener la línea ascendente y sentir el apoyo de la afición materializado en abonos y espectadores cada fin de semana.

Precios de los abonos

Pendientes del trámite con la RFEF, que será resuelto de forma inminente en los próximos días, el equipo gestor plantea continuar con la misma política de precios que en anteriores etapas del Zamora CF en Segunda B. De tal modo, que el precio de los abonos oscilaría entre los 243 euros del abono en Tribuna, a los 103 euros del abono en Fondo para el público adulto. También se estudia en este momento la posibilidad de crear abonos especiales, descuentos, así como precios infantiles para que nadie se quede sin ver fútbol de calidad, esta temporada.