El zamorano Alberto González finalizó ayer su participación en el Abierto de Tenis del Club Náutico de Zamora al caer derrotado ante el salmantino Mario Rodríguez con un marcador de 6-2 3-6 y 6-4 tras ir igualados a tres juegos en el tercera set. La vigésimo quinta edición del torneo zamorano se disputa este año en una única categoría Absoluta Masculina y es puntuable para el ranking nacional. La primera jornada se disputó el pasado martes con victoria de Francisco Javier Dueñas, de Salamanca, ante el murciano Adrián Guerra por 6-1 6-1, en octavos de final. Además el salmantino Carlos Rivas ganó no sin trabajo al zamorano Unai Llerena, de 15 años, por 4-6 6-3 y 6-1.

Ya en la jornada de tarde de ayer, en el duelo zamorano, Andrés Lorenzo se impuso a Víctor Andrés por 4-6 6-2 y 6-4.

El orden de juego de hoy comenzará a las 15.45 horas con el partido que enfrentará al leonés Mario García contra el zamorano Javier Alfonso, que regresa al tenis tras dedicarse en los últimos años al pádel. A continuación, siempre en la pista del Club Náutico, el vallisoletano Jesús Pardo se medirá con Andrés Lorenzo.

Por otra parte, el tenista español Albert Ramos ganó ayer por 6-2 y 6-4 a su compatriota Fernando Verdasco en los octavos de final del torneo de Bastad (Suecia), puntuable para la ATP y que se disputa sobre tierra batida, para clasificarse a la siguiente ronda y enfrentarse ahí a otro español, Roberto Carballés. De tal manera, Ramos doblegó al jugador madrileño en un duelo que era la reedición de la final del 2016. Aquella vez ganó el catalán, que no pisa unas semifinales del circuito ATP desde el torneo de Quito en 2018, cuando además perdió en la final contra el propio Carballés.

Para dejar en la cuneta a Verdasco, Ramos gastó una hora y 46 minutos en un partido donde empezó sin ceder ni un solo turno de saque en su primera manga. Pese a haber malgastado sus tres pelotas de rotura, el madrileño no se vino abajo por ese marcador adverso de 6-2. Así, inició la segunda manga llevándose en blanco su servicio y poniendo en apuros a su compatriota en el juego siguiente. Pero Ramos salvó cuatro bolas de quiebre y eso lo espoleó, rompiendo en el tercer juego (2-1) para encauzar un triunfo que, eso sí, le costó cerrar en su séptima oportunidad.

En los cuartos de final, el tenista de Barcelona se topará con un Carballés en buena racha tras deshacerse del bosnio Damir Dzumhur por 6-1 y 7-6(4).