El campus de fútbol Caja Rural Zamora Promesas llega a su sexta edición con dos objetivos primordiales: aprender y disfrutar. Se trata de un evento donde más de 100 de niños disfrutan de múltiples actividades para fomentar valores como el respeto o el compañerismo, entre otros tantos.

Los tiros a puerta, los juegos tradicionales o los toboganes acuáticos, han hecho que el campus haya sufrido un gran crecimiento respecto a años anteriores. El primer turno cuenta ahora con 105 niños que amplían su formación deportiva y, sobre todo, pasan un verano divertido. Razones por las que se creó este campus, que se ha convertido en una de las alternativas lúdicas veraniegas más reclamadas en el mes de julio.

El número de participantes cada vez es más elevado en este campus. Los diversos juegos y ejercicios, en los cuales se busca mejorar aquellos aspectos vitales, no solo en el deporte, sino en la vida, han atraído la atención de los más pequeños.

Para ello, se realizan numerosas actividades enfocadas, principalmente, al desarrollo de la formación, no solo deportiva, sino personal, de todos los alumnos del campus. Ejercicios relacionados con el fútbol, deporte en torno al que giran las actividades, pero también enfocados a valores como el respeto por el rival y la ayuda y/o apoyo al compañero, son señas de identidad que hacen que este campus evolucione edición tras edición.

Todas las acciones individuales y, también, colectivas, que se dan, vienen enseñadas por monitores con gran experiencia. En este ámbito, también ha habido un gran crecimiento respecto a años pasados. Esta sexta edición cuenta con 16 monitores para este primer turno y, desde la organización, no descartan que este número amplíe en las siguientes tandas, ya que el segundo y tercer turno suele ser el más demandado y en el que se registra un grado de participación más alto.

El campus cuenta con tres partes. Además de esta formativa, se da otra segunda parte en la cual se realizan juegos variados, no relacionados especialmente con el fútbol, cuyo fin es que los niños disfruten y promuevan la unión y el trabajo colectivo, así como el respeto y el buen trato con el compañero y con el rival. Y una tercera parte, donde se juegan partidos de fútbol, para que todos los niños pongan en práctica aquellos aspectos aprendidos y se dediquen al mero hecho de jugar, sin pensar en el resultado.

Estas son las tres partes que consolidan este campus, que también cuenta con dos días a la semana en los que los niños acuden a la pisicina para realizar actividades y juegos con monitores especializados en este ámbito.

Además de ello, los viernes se organizan juegos de agua con hinchables y toboganes acuáticos, donde los niños pasan una mañana refrescante, divertida y con amigos. Sin duda, este campus se ha posicionado como una gran opción de ocio para niños en verano. Gracias a ello, los más jóvenes aprenden los valores esenciales para la vida, a la vez que disfrutan del deporte que más les gusta.

Desde la organización, recalcan que el objetivo principal de este campus organizado por el Zamora Promesas, y con la colaboración y patrocinio de Caja Rural Zamora, no es otro que el de pasar las mañanas estivales de la forma más divertida y refrescante, donde poder conocer nuevas personas, nuevos amigos y, sobre todo, disfrutar de la esencia del fútbol, de la esencia del juego. Sin ganadores ni perdedores, vencedores ni vencidos.

El primer turno llega a su fin esta semana con un gran éxito de participación y diversión a partes iguales, donde más de un centenar de niños han disfrutado y aprendido. Una experiencia que muchos otros jóvenes zamoranos y de alrededores, podrán disfrutar con los siguientes tres turnos de este campus, que destaca por su dedicación y su orientación al deporte y a los valores personales.