Apenas diez días después de poner punto y final a su primera campaña al frente del Balonmano Zamora, Leo Álvarez pone buena nota a la última temporada de los "Guerreros de Viriato" y centra sus esfuerzos ahora en confeccionar un plantel competitivo para un nuevo año que augura igual de competitivo, si bien espera que resulte todo más sencillo.

-¿Cómo valora su primer año al frente del primer equipo del Balonmano Zamora?

-Creo que hay que valorarla de forma positiva. Al final, hemos disfrutado de la fase de ascenso a pesar de ser una campaña complicada y de esa irregularidad que mostramos a lo largo de la liga, especialmente fuera de casa. Mirando atrás, se ha cumplido con el objetivo deportivo marcado y el equipo alcanzó otras metas que marqué por lo que creo que cerramos el curso con buena nota.

-¿Qué otros objetivos marcó para su plantel?

-Retos deportivos como hacer un gran papel en casa o mejorar durante la segunda vuelta los datos de la primera. Son retos que, pese a las dificultades, se han logrado y me hacen estar contento con la temporada.

-¿Ha faltado algo o el equipo ha fallado en algún punto?

-No hemos logrado ser regulares. Era difícil pues Edu dejó mucha huella en el equipo y el club, contábamos con bastantes jugadores nuevos... Ajustar todos esos cambios no fue nada sencillo y llevó mucho tiempo. Sin embargo, estoy contento porque acabé viendo en pista un equipo con mi toque particular.

-¿En qué se basa ese aspecto propio de Leo Álvarez?

-Creo que vimos un equipo que jugó buen balonmano, con un estilo rápido en el que participan casi todos los jugadores y todos cuentan con protagonismo. Siempre que pueda darse eso en pista estaré contento porque es el estilo que me agrada y busco.

-¿Veremos ese estilo en su segunda campaña o habrá cambios? ¿Qué espera de su segundo año al frente?

-Espero que el acoplamiento sea más sencillo y utilicemos la base de lo trabajado este año en el siguiente. Me gustaría que todo fuera más sencillo, el día a día más cómodo y el grupo sepa ya lo que quiero o pido en cada momento para ir creciendo más rápido a lo largo del año.

-No será fácil con cuatro bajas importantes este año.

-Desde luego. Se les echará de menos porque son buenos jugadores pero, al final, el grueso de la plantilla continúa y el modelo de juego (similar al de Edu=seguirá siendo el mismo). Esos elementos deberían hacer las cosas más fáciles el próximo año pese a las caras nuevas.

-Caras como Ignasi Admella. ¿Es ese el perfil de jugador que buscará el club?

-Sí. Queremos gente joven que quiera participar en este proyecto y se adapte a las necesidades del equipo. Jugadores con proyección que hagan del primer equipo lo que ha sido hasta ahora en los últimos años.

-Todo dependerá del apartado económico, ¿no?

-Evidentemente. No creo que haya mucha diferencia en el presupuesto respecto a años anteriores, así que la línea para fichar será la misma. Ojalá pudiéramos contar con un respaldo económico que permitiera al club dar ese pasito que le falta para afrontar con garantías retos más ambiciosos y soñar con las alturas.

-¿En función del presupuesto se fijará el objetivo a cumplir por el equipo?

-No, el objetivo ya está fijado. La meta tiene que ser volver a estar arriba. Es cierto que, en función del presupuesto o la suerte, en una liga tan igualada como esta la posición puede variar pero el objetivo debe mantenerse. Si hay un traspié, acabarás más abajo; si enganchas una buena racha, estarás más arriba pero, al final, el objetivo es el que es. Luego, en función de la situación, se concretará más.

-Será difícil estar arriba si no se acierta con los fichajes. ¿Cómo se mueve el club en el mercado ahora mismo?

-Llegamos tarde, como siempre (ríe). Estamos buscando cubrir huecos porque no esperamos nuevas bajas pero, ahora mismo, no hay nada cerrado. Los jugadores cuentan con muchas ofertas... el mercado está en ebullición pero creo que somos un club muy atractivo para el perfil de jugador joven y con talento que perseguimos.

-Hablando del mercado... Vista la nómina de fichajes por parte de sus rivales, ¿Será la próxima liga más dura que la última?

-Sí, sin duda. Equipos como Torrelavega, Aranda, Teucro o Novás se están moviendo mucho y reforzando bien. Eso sin contar con los equipos que han ascendido, con fichajes de jugadores contrastados y de gran cartel. Al final, están apareciendo muchos nombres de equipos llamado a estar arriba y eso indica una gran competencia.

-¿Eso es algo positivo o negativo?

-Para los entrenadores es duro porque los equipos tienen más difícil coger una racha de resultados o alcanzar sus objetivos. Sin embargo, creo que es una auténtica gozada para el público disfrutar de una liga tan intensa con partidos tan igualados, vistosos y de tanta calidad.

-Hablando del público, ¿cree que la afición seguirá respondiendo en el Ángel Nieto?

-Eso espero. Cada día hay más entendidos y personas vinculadas al balonmano en la grada y creo que disfrutarán aún mucho más el próximo año. Para nosotros, la afición es fundamental y el equipo así lo ha dejado notar con ese punto extra que demuestra en el Ángel Nieto. Si el equipo ha rendido tan bien en casa ha sido gracias a la grada que lo ha arropado cada tarde llenando el pabellón. De hecho, fuera de casa nos ha costado más porque nos faltaba esa fuerza que transmiten.

-¿Qué alegría destaca de su primer año y espera repetir?

Mi mayor alegría ha sido hacer a todos los jugadores participes y que tuvieran su oportunidad de contar con minutos y poder ganarse más tiempo en pista. Es algo que quería lograr y lo he conseguido, un elemento que espero vuelva a repetirse y todos mis jugadores tengan su momento de protagonismo.

-¿Qué error o decepción espera evitar al frente del equipo?

-Espero dominar mejor los momentos de irregularidad, los instantes de más dificultad. Poder "dar con la tecla" y hacer los entrenamientos algo más cómodos para todos. Buscaré mejorar en esos apartados porque pienso que habiendo hecho mejor el equipo habría acabado más arriba.