La suerte está echada, el Zamora CF tendrá que demostrar esta tarde si es equipo de Segunda B o tendrá que continuar deambulando por el Grupo VIII al menos una temporada más. El equipo rojiblanco afrontará esta tarde (19.30 horas) la última oportunidad de seguir vivo en la lucha por regresar a la categoría de bronce del fútbol español que nunca debió perder hace ahora cuatro años.
Y para conseguir el objetivo que se han marcado los nuevos propietarios del club, contará el equipo de nuevo con un gran respaldo de su afición, una afición que ya respondió masivamente en los partidos anteriores con casi cinco mil personas contra el Haro, y dos grandes desplazamientos tanto a la ciudad riojana como a San Sebastián de los Reyes la semana pasada. Esta vez, todos los datos apuntan a que habrá más de cinco mil personas en el Ruta de la Plata pese a que el Alcobendas no contará con muchos seguidores.
En la mañana de ayer continuó la venta de entradas en la tienda oficial del club, y para hoy, las taquillas del Estadio estarán abiertas de 12.00 a 14.00 horas, y por la tarde, a partir de las 17.00.
Los aficionados que lo deseen podrán comenzar a ambientarse en la "fan zone" que el club instalará en el aparcamiento del Ruta de La Plata a partir de las 17.00 horas, y está programado también que las peñas animen la llegada de los jugadores al campo en torno a las 18.00 horas.
El Zamora CF necesitará más que nunca el apoyo de sus seguidores para intentar una remontada que no parece nada sencillo visto lo visto en el partido de hace una semana en Matapiñonera. El Alcobendas se mostró como un equipo que no tiene nada que envidiar al Zamora, un equipo que si en su campo mostró pólvora al contragolpe, y esta tarde todavía buscará más sorprender a los jugadores que dirige David Movilla.
Bien es cierto que las circunstancias cambiarán, que el desgastado césped artificial de Matapiñonera en nada se parece a la cuidada hierba natural del Ruta de La Plata a la que estarán más adaptados los rojiblancos, pero tampoco parece que vaya a ser este un factor definitivo para lograr la remontada.
En San Sebastián de Los Reyes el Zamora tuvo muchos problemas para frenar el contrabolpe del Alcobendas que golpeó en numerosas ocasiones a una defensa que no fue capaz de frenar, ni a Pituli, por la izquierda, ni a Sergio Arribas por la derecha, los dos extremos del equipo madrileño que se desdoblaron a la perfección con los carrileros Gallardo y Gonzalo. Arribas terminó siendo un verdadero tormeneo para una defensa en la que estaban amonestados Chete y Alcañiz, y tampoco retrasar a Garban al lateral defecho sirvió de mucho para frenar las ofensivas de los madrileños.
Está claro que no existe una barita mágica para solucionar los problemas del partido de ida que terminaría con un 2-0 que supone un duro reto para el Zamora que tiene que marcarse como principal reto el no encajar ningún gol, y mantenerse vivo el mayor tiempo posible porque dos goles se pueden marcar en los dos últimos minutos.
David Movilla sorprendió el jueves a dar por hecho que el Alcaobendas marcará, lo que le obligará al Zamora a marcarle cuatro goles a su rival. El técnico tal vez buscase con esta aseveración una motivación especial para sus jugadores, que la necesitarán, desde luego.
No debería haber grandes modificaciones en el equipo que presente hoy el Zamora. Jon continuará en la portería; en la defensa deberían continuar Garban, Asiel, Alcañiz y Coque, la línea más utilizada por Movilla en toda la temporada; en el centro del campo Carlos Ramos y Juanan, acompañados por Fer o Pipi, con David Alvarez como media punta, y el técnico no tendrá sencillo elegir entre Sergio García o Murci, los dos arietes que utilizó en Matapiñonera.
En el Alcobendas Sport no se esperan tampoco grandes sorpresas en el equipo inicial que presente el entrenador Emilio Ferreras que podría mantener a Lechuga en la portería; el pasado domingo jugó con los centrales Rangel, Ramos y Molina, con Gallardo y Gonzalo como carrileros; Amores y Leo en el centro del campo, y una tripleta ofensiva con Arribas, Roberto y Pituli.
