El municipio de Ricobayo se rindió al espectáculo motero vivido ayer en sus calles. La segunda quedada motera de este municipio congregó a decenas de amantes de las dos ruedas, que disfrutaron de una jornada de convivencia. Asimismo, los asistentes al evento realizaron una ruta gastronómica con el Linda Café Bar, el organizador del espectáculo motero, como principal parada. Durante la tarde de ayer, se llevó a cabo una exhibición de minimotos en la que participaron 10 pilotos federados. La prueba contó con ocho mangas y requirió toda la pericia y maña de estos experimentados motoristas, no en vano las pequeñas dimensiones del recorrido -así como sus reviradas curvas- obligaban a imponer la habilidad sobre la velocidad desaforada. La actividad se desarrolló sin incidentes y fue muy seguida, tanto por los motoristas de la quedada como por parte de los vecinos de la localidad.