Reconocía Saulo Hernández al término de la fantástica campaña del Aquimisa Queso Zamorano en LEB Plata que el cambio sufrido por dicha liga el pasado verano había beneficiado a su equipo. Una opinión positiva que, por lo visto, también tienen en la Federación Española de Baloncesto pues el ente nacional ha apostado por mantener la estructura impuesta el año pasado pero con diversos matices. Alteraciones y nuevas normas que harán el campeonato más largo e intenso, a la que vez que alterará la habitual composición de las plantillas por parte de los clubes.

La FEB quiere que el formato por conferencias continúa pero lo hará con más equipos. En esta ocasión habrá 24 equipos en liza, doce por grupo, que disputarán como este año una primera fase de liguilla pero compuesta por 22 jornadas. Un tramo inicial de la competición en el que los participantes buscarán clasificarse para el Grupo A1, en el que se peleará por el ascenso y que mantiene su cupo de doce equipos al igual que el Grupo A2 donde se jugará por evitar el descenso.

Como ocurriera en la última temporada, la segunda fase será una liguilla a doble partido en el que se arrastran los resultados en duelos directos frente a rivales de la misma conferencia. Sin embargo, además del primer clasificado del Grupo 1 que ascenderá directamente, otros ocho equipos pelearán en eliminatorias por llegar a una final en la que ambos participantes serán ascendidos.

Estos cambios, lógicamente, amplían un calendario que arrancará el 21 de septiembre y cuya liga regular finalizará el 2 de mayo. Un camino liguero que contará con más ventanas FIBA y en el que la Copa LEB Plata tendrá su fecha el 28 de diciembre.

Sin embargo, lo más llamativo no de la próxima LEB Plata no está en su transcurso o su calendario, está en sus nuevas normas de competición.

La FEB aspira a que el jugador nacional gane protagonismo en LEB Plata. Así, ha reducido la presencia de jugadores extranjeros no comunitarios a un máximo de dos, promoviéndose a su vez la reducción del 20% en las cuotas a aquellos equipos que cuenten con 6 jugadores nacionales en plantilla añadiendo un 5% adicional si, además, dos de ellos pertenecen a jugadores/as Sub-22.

Además, la federación también quiere que esta sea una categoría de formación y pondrá en marcha una nueva norma en la que todos los equipos deben mantener sobre la pista en todo momento al menos un jugador de formación de los que integran el acta de partido.

Dos cambios que alterarán, sin duda, la forma de maniobrar por parte de los clubes en el mercado a lo largo de este verano.