El FS Zamora se enfrentaba a un partido en el que, como la pobre entrada al campo demostraba, nadie tenía especial interés en presenciar o disputar. Los locales, ya descendidos matemáticamente a Tercera División, se enfrentaron al Guardo, segundo clasificado de la categoría y que llegaba a la capital del Duero con los deberes más que hechos toda vez que ya se encuentra clasificado para la Copa del Rey. La despedida de la categoría no pudo ser peor, el conjunto local perdió 2-4 y mostró una versión terriblemente pobre, sobre todo en lo que atañe a la producción ofensiva. ¿Lo mejor? La intensidad y el orgullo mostrados en los últimos minutos, pero el partido de hoy y esta campaña demuestran que el FS Zamora va a necesitar muchas más cosas para volver a las categorías superiores, donde no hace tanto tiempo se encontraba peleando con los mejores equipos del fútbol sala profesional.

Salió el Zamora entonado, con ganas de reivindicarse tras confirmar el descenso a tercera División. Alberto Grande se decidió por un quinteto joven y su apuesta fue recompensada con un gol en el minuto cuatro. Nacho supo aprovechar un pase de la muerte de Héctor tras un rapidísimo ataque fruto de un robo en la medular del campo. Los zamoranos justificaron con su actitud inicial que no venían a cumplir el trámite, sino que querían demostrar que el FS Zamora sí es un equipo de 2ª B y que la Tercera no es el lugar natural de un conjunto que hace tan solo una década disputaba la máxima categoría.

El comienzo fulgurante del conjunto de Alberto Grande fue rápidamente cortocircuitado con un gol de Kuin en el minuto cinco. El tanto llegó en una jugada embarullada que el Zamora no supo defender con solvencia propia de un equipo profesional. Una vez más, jugadores y afición comenzaron a revivir el día de la marmota. El partido llegó con la equidad en el marcador hasta el descanso.

De poco sirvió el tiempo de descanso para el FS Zamora, que comenzó la segunda mitad del encuentro con la galbana y la apatía por bandera. El Guardo, mucho más activo, anotó a los 30 segundos gracias a una buena jugada rematada por Cifu. El gol pareció despertar a los de Alberto Grande, que encadenaron un par de ocasiones que fueron repelidas por la ordenada defensa del equipo visitante.

Desde la vacía grada la escasa afición que había tenido la audacia de presenciar este espectáculo le pedía a los de blanco ganas e intensidad. De poco serviría, en el minuto 25 el número 2 del Guardo, Rober, anotaba el tercero para la escuadra verde fosforito. Minutos después, tras una pérdida de Josico en salida de balón, solo el palo impediría el cuarto de los visitantes, gol que llegaría en el siguiente ataque con la firma de Kuin; 1-4 y todavía 14 minutos por jugar.

Un precioso gol tras jugada individual de Magy, que fusiló al portero rival con un potente disparo con la zurda en el minuto 27, puso el 2-4 en el marcador y maquilló el despropósito que estaba perpetrando el FS Zamora. Poco más, el FS Zamora utilizó el portero jugador durante gran parte de la segunda mitad. Recurso que resultó estéril ante el entramado defensivo del Guardo.

El FS Zamora desciende a Tercera dando la misma imagen que toda la temporada, con un juego pobre, falto de ideas y acumulando errores defensivos impropios de la categoría. El regreso será complicado.