Derrota clara la sufrida en el Ángel Nieto por el Aquimisa Queso Zamorano que, tras ceder por 53-73 ante el CB Villarrobledo, se queda sin margen de error para seguir luchando por el play-off a LEB Oro en las dos jornadas que restan del grupo por la fase de ascenso en LEB Plata.

La contienda no comenzó nada bien para el Aquimisa Queso Zamorano. Y no solo porque CB Villarrobledo anotara la primera canasta, también porque en apenas dos minutos de tiempo perdió cuatro balones que permitieron a los visitantes abrir una clara brecha en el marcador. Un parcial de 0-7 que buscó interrumpir Saulo Hernández con su primer tiempo muerto antes de que el horroroso comienzo de los suyos fuera todavía peor.

El temprano receso no tuvo incidencia inmediata en el marcador. Los zamoranos siguieron sin encontrar el aro rival durante un par de minutos más, siendo la única noticia positiva para los locales una pequeña mejoría en defensa que evitó que la diferencia se ampliara antes de que Robinson pusiera firmara los dos primeros puntos del Aquimisa Queso Zamorano con dos tiros libres. Sí se notó un ligero cambio en la dinámica del envite a partir de ese puntos, con NIang dejando en dos la desventaja frente a un CB VIllarrobledo al que un triple lejano devolvió las fuerzas justo antes de perder las riendas del envite (6-11, m. 5).

El tramo final del primer acto tuvo un guion similar a lo vivido al principio del mismo. Con el colíder dominando y Aquimisa Queso Zamorano sufriendo para anotar, logrando la mayoría de su botín en los diez minutos iniciales desde la línea de tiros libres. Un recurso que la habilidad de Niang o la de Libroia permitió explotar dejando el marcador en 13-19 antes de iniciarse el segundo periodo.

Con un triple de Meikle abrió Aquimisa Queso Zamorano el siguiente cuarto, en el que la pareja arbitral se volvió protagonista con errores en sus decisiones que beneficiaron al CB Villarrobledo. Especialmente en un contragolpe de Libroia que un rival cortó con el pie o la rigurosa sanción de una falta antideportiva a Meikle en su intento de robar el cuero de manos rivales. Fuera como fuera, los visitantes tampoco se libraban de ir acumulando personales dada la dura defensa que emplearon para mantenerse por delante (18-21, m. 14).

La intensidad del juego, especialmente en cancha propia por parte de ambos equipos, daba lugar a un duelo de pocas canastas y con muchas interrupciones en el que los de Saulo Hernández no terminaban de encontrar el ritmo adecuado. Tampoco el acierto desde el perímetro, un factor que le hubiera podido permitir encarar la recta final de la primera parte con unos guarismos mejores que el 18-25 del luminoso a tres minutos para el descanso. Un tiempo en el que los colíderes de la Liga EBA estiraron la diferencia hasta los 14 puntos. Diferencia máxima de una primera parte que concluyó con esa misma diferencia tras la concesión de una canasta fuera de tiempo a los visitantes (22-36).

Necesitado de puntos y acierto para remontar la contienda, el Aquimisa Queso Zamorano regresó laborioso a la pista pero CB Villarrobledo no se despistó ni por un segundo y tras apenas dos minutos de juego forzó el tiempo muerto local ampliando su ventaja a veinte puntos (24-44). Una distancia que obligaba a los de Saulo Hernández a tomar el mando del duelo sin dilación.

Lo intentó el CB Zamora pero sus posesiones siempre acababan en tiros forzados mientras que las de los albaceteños finalizaban en tiros cómodos de Tury que acribilló ayer sin piedad a su ex-equipo. Le bastaba al colíder con gestionar sus faltas personales y no dejar de anotar con cierta regularidad para cerrar el duelo. Cosa que hizo, haciendo estériles los intentos locales encabezados por Niang (37-56).

Con más de una vientena de puntos de diferencia, el CB Villarrobledo no tuvo ningún problema para sellar su victoria en el Ángel Nieto saliendo airoso de los últimos diez minutos del encuentro. Un periodo final en el que los árbitros continuaron con su festival de silbato, los visitantes con la defensa dura y, por su parte, el Aquimisa Queso Zamorano tratando de maquillar una derrota en un partido cuyo desarrollo nunca le favoreció. Ni siquiera en este desenlace en el que intentó elevar su intensidad defensiva (43-63, m. 34).

Ese punto más de garra hizo que los hombres de Saulo Hernández no vieran aumentada su desventaja. Sin embargo, tampoco gozaron de la puntería obligada ante la canasta albaceteña como para contar con alguna esperanza de acercarse a su rival en el marcador. Meikle, Niang y Libroia lo intentaron pero, a la postre y pese a los intentos de compensar por parte del dúo arbitral, el conjunto azulón no tuvo el día y se complicó su puesto en el play-off de ascenso a LEB Oro.