Si el Atlético Benavente es la cara del fútbol sala provincial, el FS Zamora es la cruz. El conjunto capitalino ha caído en una racha perdedora -encadena tres derrotas de forma consecutiva- que le ha hecho ahogarse en los puestos de descenso, ocupando el tercer puesto por la cola con 22 puntos. En el último encuentro de liga, en el que cayó derrotado por 3-5 en el Ángel Nieto frente al Xove, el club pidió el respaldo de la afición y de los clubes zamoranos para intentar revertir una situación que a cada fin de semana parece tener peor solución. No fue suficiente.

Mañana a las 12.00 horas el conjunto rojiblanco visita a los gallegos del Sala Ourense 2014 en un partido transcendental en la lucha por la permanencia en Segunda División B. Algo que se convertirá en una constante hasta el final de la liga, ya que con 22 puntos en su haber el FS Zamora es el peor situado para mantener la categoría: Santiago de Sama, 23 puntos; Leis Pontevedra, 25; Albense, 29; y Sala Ourense, con 33 putos, se encuentran en una posición mucho más favorable (especialmente este último) para asegurar su concurrencia el próximo año.

Examinando sus últimas tres derrotas, en las que el saldo de goles arroja 13 goles en contra y 5 a favor, el problema es más que evidente: el equipo de la capital sufre en defensa y no consigue capitalizar su producción ofensiva. Los de Alberto Grande están obligados a revertir esta situación y la única manera factible es a través de la victoria.