David Movilla, técnico del Zamora CF, expresó en rueda de prensa previa al encuentro de este fin de semana en el Ruta de la Plata que las aguas de la plantilla rojiblanca corren con calma y sosiego por el cauce natural marcado esta temporada bajo su dirección. No hay excitación por el liderato ni presión por intentar mantenerlo ante el Atlético Bembibre, el equipo se sigue "alimentando de estabilidad" y espera contar con "la unión de todos" para dar un paso más en su camino a Segunda División B.

El entrenador señaló ayer que cuenta con "el mismo optimismo" ahora que hace una semana. "Para los que vivimos el día a día, la situación no ha cambiado tanto. No estamos en ninguna montaña rusa emocional en el que cada resultado nos altera el estado de ánimo. No sentimos gran diferencia, si bien sabemos que pasan los días y queda menos para el final de temporada. Aun así, bastante tranquilos", afirmó, señalando que sí ha notado "mayor ilusión y convencimiento" en el entorno. "Percibo que se ha pasado del dramatismo a la euforia y nosotros tenemos que mantenernos en el equilibrio. Los números me hacían ser optimista la semana pasada y apelamos a ese estado una vez más. No queremos alimentarnos de visiones negativas o positivas. Nosotros nos alimentamos de estabilidad y nuestra intención siempre es poner el foco en el partido que tenemos por delante", relató.

Movilla también tuvo a bien dar a conocer una reflexión sobre las palabras que Víctor Aldama, presidente ejecutivo, pronunció durante la Asamblea General Extraordinaria del pasado miércoles en la que incidió sobre los abucheos recibidos por los jugadores del Zamora CF durante su victoria por 5-2 ante la Virgen del Camino. El entrenador del equipo recordó que ya había dado su impresión "hace un par de semanas" y que "en líneas generales", entiende que "la plantilla se siente respaldada" si bien "aquel día no se sintiera exactamente lo mismo" y comprenda que "la masa social es soberana para mostrar su disconformidad". "Mi reflexión es que ganar 7-0 o 9-0 no nos vino nada bien porque parece que si ya no logras esos marcadores no has jugado bien y no se valora cada gol o cada punto que logra el equipo. También lo veo de forma positiva porque ese nivel de exigencia por parte del socio viene incentivado por lo bien que lo ha hecho el equipo y es capaz de volver a disfrutar aunque "solo", irónicamente, seamos capaces de meter cinco o empatar a uno contra la Gimnástica", razonó.

En relación a este asunto, Movilla destacó que no cree que haya "un solo zamorano que no quiera ver al Zamora CF en Segunda B" y apeló a la unión para que ese ascenso cobre forma. "Lo que debemos preguntarnos es qué podemos hacer cada uno para que eso ocurra, cómo se puede contribuir porque soy de los que piensa que lo que no suma, resta. Si somos capaces de sumar seremos más fuertes", comentó, apostillando "Sueño con un club unido en todos los sentidos, con el mismo propósito para conseguir el reto que nos hemos propuesto".

Bembibre, un rival incómodo con nada que perder

En lo relativo al encuentro del próximo sábado, Movilla destacó que no considera ninguna ventaja que el Atlético de Bembibre acuda al Ruta de la Plata sin jugarse nada. De hecho, esto puede ser peligroso ya que puede dar alas en su intento de lograr frenar al líder algo que consideró "una posible motivación" para el conjunto leonés. Un adversario al que calificó como "un equipo incómodo". "Es un conjunto que se mueve en resultados cortos pues no es muy realizador pero encaja pocos tantos. Tiene futbolistas de gran competitividad y muchos elementos que lo convierten en un contrincante difícil más allá del apartado individual", indicó, afirmando que "es uno de los pocos equipos que se nos ha puesto por delante en el marcador" y en el encuentro de la primera vuelta ya dejaron clara la dificultad que entraña superarles.

Para conseguir la victoria, Movilla considera que será clave "alejarse del componente clasificatorio". "Si el equipo no pone sus cinco sentidos en el juego, nos pintarán la cara", avisó el entrenador afirmando que el vestuario rojiblanco tratará de "centrarse en el juego y no en las repercusiones del mismo porque el aspecto clasificatorio no reporta nada en absoluto sobre el campo". Un plan que tratará de llevar a cabo sobre el verde del Ruta de la Plata con un once en el que serán bajas seguras Garban y Alcañiz. Un equipo inicial que tiene "más o menos claro" si bien, la de esta semana es "una convocatoria más abierta que la de otras jornadas". "Tenemos claro el tipo de partido que nos interesa para sacar el mejor resultado posible y la estructura a desarrollar para ello, si bien aún hay algún matiz por definir", concluyó.