El Zamarat afrontaba bajo negros nubarrones el partido de ayer en Gernika porque cuatro de sus jugadoras arrastraban problemas físicos durante la semana. Finalmente, Chelsie Nelson y Noelia Pariente pudieron jugar, pero la potencia de Gernika sería demasiado para el equipo zamorano aunque hubiera dispuesto también ayer de Quevedo y Seda que continúan recuperándose de sus lesiones.

Fue un partido en el que el Quesos El Pastor, pese a afrontarlo con escasas esperanzas, ofreció ante las cámaras de Teledeporte una imagen digna y si algo se puede destacar sería el hallazgo de Tess Madgen como la capitana sobre la cancha que hasta el momento le ha faltado al equipo de Fran García, al tiempo que Noelia Pariente aprovechaba para demostrar que puede ser una jugadora útil para dar minutos y oxigenar a sus compañeras en momentos puntuales.

Por lo demás, y como era previsible, Gernika posee un equipo al que es imposible hacerle frente en estos momentos al Quesos El Pastor, incluso con la plantilla al completo, y así quedó patente en todo momento.

La alarma causada el día anterior por los problemas físicos de Chelsie Nelson y Noelia Pariente, afortunadamente, quedaron superados porque ambas estuvieron disponibles durante todo el partido, e incluso la norteamericana salió en el equipo inicial. Sin embargo, tanto Laura Quevedo como Tamara Seda, tuvieron que ver el partido desde el banquillo.

Y pese a estas dos importantes bajas, el Quesos El Pastor ofreció una imagen muy digna durante toda la primera parte. Las zamoranas tomaron la iniciativa en os primeros minutos, lideradas por la australiana Tess Madgen que debutaba con muy buenas sensaciones. Madgen no sólo desmostró tener capacidad para anotar tanto en penetraciones como desde el perímetro, sino también para asumir la responsabilidad de organizar el juego de su equipo. Siempre encontró una compañera a la que pasar cuando no tenía opciones de mirar a canasta, y el equipo agradece mucho esta función que asume la australiana.

En su primera acción recibía una falta y en el segundo balón que recibía, Madgen anotaba su primer triple con la camiseta naranja (0-3); seguidamente dio una asistencia a Nelson que ponía el 0-5 y en una nueva personal que recibía la subcampeona del mundo, Chelsie anotaba el 3-7.

Era la máxima ventaja del Quesos El Pastor, pero Gernika, que ha acertado en los cambios que ha realizado en su plantilla en las últimas semanas, sacaba a relucir su poderío para no sólo igualar el marcador a 7, sino iniciar un parcial que Fran García no fue capaz de frenar con un tiempo muerto y que llevó el marcador hasta el 17-7.

Las zamoranas, dosificando al máximo tanto sus fuerzas como sus personales, lograron frenar la reacción vasca y el primer cuarto se cerraba con 24-13.

Gernika volvió a la cancha muy centrado y siguió poniendo tierra de por medio sobre el Zamarat hasta llegar al 33-17 que provocó el segundo tiempo muerto de Fran García. El equipo naranja cogió oxígeno y firmó una buena recuperación para acercarse a nueve puntos pero un triple inverosímil de Banham puso el decepcionante 38-24 del descanso.

Era difícil que el Quesos El Pastor consiguiese remontar en la segunda parte y pronto quedaron descartadas todas las dudas porque, pese al acierto que comenzó a mostrar Ainhoa López, el Gernika se mostró intratable en el lanzamiento y las zamoranas, por contra, no encontraban la forma de colar la pelota en el aro, hasta el punto de que en los primeros seis minutos del tercer cuarto, tan sólo lograron anotar dos puntos. Así Lointek firmaba un 15-2 que dejó resuelta la contienda.

El 59-36 del tercer parcial lo decía todo y el último cuarto ya no tuvo historia con un Quesos El Pastor totalmente agotado y un rival que se recreaba en la suerte y hasta la fortuna tenía de cara para continuar incrementando su ventaja hasta el 75-49 definitivo.