Chivata del club Nápoli se adjudicó en la mañana de ayer la victoria en la Copa Zamora de Galgos tras imponerse en una cerrada lucha a India de Espabilada, del club Moraleja, a la que superó por un ajustado 2-1. Esta victoria del Nápoli ha servido para que los galgueros zamoranos rindan un merecido homenaje al que fuera alma mater del laureado club zamorano -el único que ha ganado un Campeonato de España-, Generoso Martín Malillos, fallecido el 2 de febrero de 2017. Curro Martín, propietario y criador de Chivata, recordó que aquella temporada no pudo dedicar la Copa Zamora a Martín Malillos con otro de sus perros que cayó eliminado en semifinales, pero dos años después ha podido cumplir la que era su gran ilusión.

Chivata tiene 22 meses y es una perra que no destaca ni por su gran salida ni por su largo aliento, sin embargo, puede calificarse como una galga muy completa, lo que le ha valido para conseguir este triunfo que viene a redondear el magnífico año que ha completado el Nápoli que ya clasificó en semifinales del Campeonato de Castilla y León otra perra que fue eliminada, tras sufrir una lesión, por Ada de Cantimpalos que se encuentra corriendo el Nacional en Nava del Rey.

No lo tuvo fácil Chivata con India de Espabilada, una perra negra del club Moraleja criada por Angel Pérez, quien ha logrado el que puede calificarse como un gran hito en la historia de la Copa Zamora al clasificar en el plazo de tres años a dos de sus perras para la final. Entonces fue Espabilada la que cayó en la final frente a Mayuca de Jose Fipor en 2016 y ahora ha sido su hija la que ha acariciado la victoria final de esta competición que se ha convertido ya no sólo en la más importante de Castilla y León por debajo del la fase reginal del Nacional, sino ya en una de las más destacadas de España al contar con la práctica totalidad de los clubes de la provincia que se han ido eliminando desde el mes de noviembre.

Y la final volvió a demostrar la calidad de las liebres del coto de Granja de Moreruela, una calidad fruto del gran trabajo que realiza el club Zamora a lo largo de todo el año para que no sólo se mantenga esa ya legendaria liebre de Moreruela, sino para que, dentro de lo que es posible hoy por hoy, también se pueda hablar de una cierta abundancia como quedó probado ayer con las ocho liebres que vio la mano en la soleada mañana de ayer.

La primera, tras una suelta en la que los perros tardaron en engalgar, se la adjudicó por unanimidad de los tres jueces Chivata tras una carrera de 1.49. Tras la reglamentaria media hora de descanso, India contraatacaba en otra liebre de 2.05 en la que su rival recibía una amonestación.

Ya pasado el medio día, saltaba una nueva rabona en la que tardaron en engalgar las dos hembras y especialmente India que perdió de vista a la liebre. Chivata continuó la persecución en solitario hasta que se fue al perdedero, pero los jueves, por unanimidad, declaraban nula la carrera en una decisión un tanto controvertida que no todos los aficionados compartieron. Y la liebre definitiva saltó pasadas las 14 horas. Chivata no acusó el sobreesfuerzo de la carrera anterior y terminó por imponerse con claridad con tres pañuelos rojos que le daban el segundo punto y la victoria final en la Copa Zamora en 1.44.

Chivata había alcanzado la final tras eliminar en semifinales al club Zamora (1.25 y 2.23), en cuartos de final al San Antonio (1.10), y al Viriato en octavos de final (2.08).

Como es tradicional, la final de la Copa Zamora concluyó con una comida para los participantes tras la que se celebró el acto de entrega de los trofeos a la campeona y subcampeona, acto en el que participó el diputado provincial José Angel Ruiz.

La temporada galguera finalizará próximamente con las semifinales y finales del Campeonato de España que se disputa en Nava del Rey. Al cierre de esta edición, la Federación Española no ha establecido una nueva fecha para celebrar las semifinales que fueron aplazadas el pasado sábado por el mal tiempo.