El Real Madrid se enfrenta al CSKA de Moscú este miércoles en el Santiago Bernabéu (18.55 horas) en la última jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones, un partido en el que los blancos no se juegan nada y podría volver a apostar por las rotaciones en busca de tomarse la revancha ante un rival que le derrotó en su estadio y que necesita arañar algo positivo para optar a jugar al menos la Liga Europa.

Los de Santiago Solari llegan a este encuentro con los deberes hechos gracias a su victoria en Roma (0-2), lo que les permitirá seguir repartiendo esfuerzos ahora que se avecina ya el Mundial de Clubes, la última oportunidad para cerrar con un título un año lleno de luces y sombras.

El ambiente es tranquilo ya que el Real Madrid se ha aupado al cuarto puesto en LaLiga Santander, a tan solo cinco puntos del líder, el FC Barcelona, y además, en el Santiago Bernabéu, la imagen ha sido algo mejor y más dominante, un guión que intentará repetir esta noche ante un CSKA que debe tomar más riesgos de los necesarios y que sabe que el campeón de Europa querrá demostrar que lo sucedido en el Luzhniki no se va a repetir.