El entrenador del Zamora CF, David Movilla, respecto a las bajas de jugadores importantes que arrastra el equipo en las últimas semanas, señaló ayer que "analizamos todas las situaciones y más que preocuparnos, nos ocupa, pero también analizamos otras cuestiones, los errores que cometemos en los partidos, cómo secuenciar bien el trabajo semanal o mensual. Todos los aspectos del equipo merecen reflexión y si hay alguna lesión, también. Somos autocríticos y exigentes con lo que hacemos".
El técnico reconoce que el Bembibre "no está haciendo una mala temporada, nuestros resultados no son nada malos pero no sé si son suficientes. He percibido que hemos pasado de cierto miedo a ver peligrar el play off a un exceso tal vez de confianza de cara a ganar el Campeonato. Me gustaría mantener el equilibrio. Las cosas van como queremos que vayan pero quedan muchas jornadas y pelear por el campeonato nos va a llevar a una renta más cercana a los cien puntos que a los noventa. Eso son palabras mayores. Me han preguntado si había algún síntoma de relajación en el equipo, y lo que vi fue solo ambición y gran rigor porque el margen de error es muy reducido para pelear con los mejores. Llevamos un ratio de unos 90 puntos al final de temporada y todavía no somos capaces de alcanzar el liderato. Eso quiere decir que nos tenemos que exigir más porque ni la Arandina, ni la Segoviana o el Cristo Atlético, nos están dando tregua y no cabe lugar más que para la mejora", explicó.
Respecto a la necesidad de que el equipo tenga que ponerse el mono de trabajo en el partido de Bembibre que estará muy condicionado por el mal tiempo, Movilla aseguró que "el mono de trabajo este equipo se lo pone todas las semanas y cada día".
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