La selección española de fútbol despide el año 2018 este domingo con un partido amistoso frente a Bosnia-Herzegovina (20.45 horas) que se disputa en el Estadio de Gran Canaria y que jugará sabiendo si está clasificada para la 'Final Four' de la Liga de Naciones en función del resultado que consigan Inglaterra y Croacia en Wembley. España sólo puede esperar tras su derrota en Zagreb. Un empate en Londres este domingo (15.00 horas) es el único camino para pelear por el nuevo trofeo de la UEFA.

La selección saltará al verde de Las Palmas con su futuro resuelto y con muchas ganas de enjugar su imagen tras las dos últimas derrotas. Una buena oportunidad para cambiar el regusto. Los de Luis Enrique apagaron su fulgurante comienzo con dos tropiezos inesperados, sobre todo el del pasado jueves ante la subcampeona del mundo después de haber dominado en las fases más importantes del encuentro. Sin embargo, el tardío gol de Jedvad deja a España con un ojo en Wembley antes de afrontar su último compromiso de un convulso año.

Con la insípida participación en el Mundial de Rusia, eliminados en octavos de final, el equipo nacional -tras Lopetegui y Hierro- asentó su hoja de ruta con la llegada del seleccionador asturiano, que ha impuesto una base clara, apoyada en la llamada 'meritocracia' que le ha 'obligado' incluso a citar a Jordi Alba, con quién se intuía una mala relación.

Asperezas al margen, Luis Enrique está liderando un equipo que ha ofrecido grandes momentos y que este domingo tendrá una nueva oportunidad de demostrarlo. Ante la afición canaria, donde 'La Roja' no juega desde hace 11 años, los menos habituales quieren aprovechar la ocasión para ganarse la confianza del técnico y seguir contando de cara al futuro: sobre todo, para la clasificación a la próxima Eurocopa que comienza en marzo de 2019.