Dani Mateos vuelve a ser, por fin y oficialmente, jugador del Zamora CF. El zamorano lleva meses, desde que comenzó la pretemporada en el mes de julio, inmerso en la disciplina del club, aunque no ha sido hasta ayer cuando en la entidad del Duero han decidido hacerle ficha federativa, en concreto hasta la marcha de Saúl al CD Villaralbo en calidad de cedido que se fraguó el pasado martes.
El lateral derecho, de 26 años, vivirá así una nueva etapa en la entidad del Duero, en su casa donde comenzó en el filial para después dar el salto al primer equipo, debutando en Segunda B. En su trayectoria deportiva ha pasado por otros clubes como el Sestao River, CD Villaralbo, Guadalajara o la UP Plasencia, y ahora volverá a defender la camiseta rojiblanca una vez, además, que está recuperado de la lesión de rodilla que sufrió la pasada temporada. Así, Dani Mateos se encuentra en un gran momento personal y deportivo y se incorpora muy ilusionado al proyecto rojiblanco después de meses de intenso trabajo cerca de sus compañeros. De hecho, estaba considerado uno más y viajaba de forma habitual con la plantilla, aunque ahora podrá sentirse futbolista de nuevo.
Él mismo admitía estar "muy contento" por la noticia y aseguraba estar listo para saltar al terreno de juego en cuanto el entrenador lo considere oportuno. En cuanto al equipo, comentó que lo ve muy bien y con mucha seriedad en el campo y ahora espera aportar su granito de arena.
Sergio García, a la espera
Esta buena noticia se contrapone con la de Sergio García. El jugador aún no conoce el alcance de su lesión, pero sus sensaciones no son positivas. El delantero zamorano teme sufrir una nueva rotura muscular que le mantenga varias semanas alejado de los terrenos de juego, aunque por el momento prefiere esperar a lo que digan los servicios médicos. También sigue a la espera de evolución Pipi, mientras que el resto del vestuario está en plenas condiciones y trabajando duro para afrontar el encuentro de este domingo a mediodía ante el Burgos Bupolsa.
La premisa que todos tienen clara en el vestuario es la de alargar la buena racha y, tras el empate en casa del líder, vovler a sumar de tres en tres frente a un rival que actualmente ocupa la décimoquinta plaza de la clasificación. El equipo está con la moral muy alta e ilusionada por el gran momento que atraviesa. Será, además, una buena oportunidad para ver cómo responde la afición al hecho de jugar a mediodía. En el club del Duero lo consideran una prueba aunque parece que el horario "oficial" será las tarde de los domingos a las 17.30 horas.
