El derbi regional truncó la buena racha de Aquimisa Zamora, derrotado tras cuatro jornadas venciendo. Enfado mayúsculo en los de Saúl Hernández con los colegiados, pero lo cierto es que entre los últimos tres minutos y medio y los primeros dos y medio de la prórroga, seis minutos de juego, Quesería La Antigua Tormes anotó un escalofriante parcial de 21-4. De 56-65 al inesperado 69 iguales de la prórroga, y un 77-69 para los locales. Pesaron las ausencias, la falta de banquillo para asumir una prórroga y al final el desenlace fue adverso en un duelo regional donde no se notaron apenas las diferencias en la tabla entre ambos.

Arrancaba el encuentro en Würzburg con los zamoranos marcando desde el primer compás su superioridad teórica. Beltrán abría la cuenta, con Cristopher Iza marcando la pauta en las pinturas y un 0-6 en el luminoso ya que los salmantinos brindaban pérdidas y malos tiros. No obstante, chispazo de acierto local y parcial de 8-1 en una poderosa respuesta para ubicar el 8-7 en el electrónico, muy acertado el ala-pívot bosnio Sikiras. Meikle truncaba este mal momento con un oportuno triple cuando restaban cuatro minutos para el intermedio. Alternacias en el control del marcador hasta el final de estos primeros diez minutos, con Meikle como mejor argumento ofensivo de los de Saulo Hernández. Una última canasta de Villamil permitía a Queso Zamorano llegar al final de este cuarto de apertura sólo un punto por debajo, 18-17, claramente de más a menos los visitantes.

Libroia abría el segundo acto con un triple espectacular, sellando el húngaro Somogyi un parcial de salida de 0-6 para un Zamora que nuevamente entraba con fuerza en la pista, cerrando bien el rebote y moviendo con inteligencia sus piezas en el juego de ataque. Somogyi seguía más que entonado, ocho puntos consecutivos en su haber, mientras Antúnez respondía por el bando charro, 24-28 a seis minutos del descanso.

A dos minutos del intermedio, y tras unos compases marcados por el equilibrio y con más errores que aciertos en los tiros de unos y otros, Saulo pedía un tiempo muerto con Aquimisa Queso Zamorano seis puntos arriba, 29-35. Sikiras y Niang anotaban, 31-37, con un minuto y medio por delante donde ya no hubo más claridad en el lanzamiento. Somogyi y Niang perdonaban y al descanso se llegaba con ese corto marcador, y renta de seis para Zamora.

Tras los quince minutos de parada, CB Tormes salía a por todas tras la reanudación, triple de Moreno para empezar y parcial de 7-2 en dos minutos que obligaba al tiempo muerto de Saúl. Quesería La Antigua había cogido el mando del encuentro ante una escuadra visitante erradísima en las transiciones y la selección de tiro, mientras los locales sellaban un parcial de 13-2 gracias al joven talento de Ehigitor en las pinturas.

Despertaban Somogyi y Libroia en el momento adecuado para mantener al menos el equilibrio en el luminoso, y dos tiros libres de Iza a dos minutos volteaban para dar de nuevo la ventaja a Aquimisa (48-49), si bien esta tercera manga acababa un punto abajo después de una última canasta de Round.

Tocaba remar contra corriente en los diez minutos finales, y los zamoranos parecían conseguirlo desde la tranquilidad y el buen hacer. Los exteriores tomaban la responsabilidad anotadora, Niang y Libroia dirigiendo al equipo y sumando, pero los charros no querían descolgarse y cada canasta era celebrada por la grada, con Sikiras a seis minutos del final ubicando un 56-58. Niang e Iza relanzaban a Aquimisa seis arriba, con un triplazo de Niang a tres y medio para un 56-65. Parecía que el encuentro estaba ya casi decidido, sólo con administrar el tiempo y posesiones largas, y Niang ubicaba a 1:12 un 62-69 casi definitivo. Pero ahí comenzaron las decisiones polémicas de los colegiados, cuando en el minuto final por Zamora llegaban dos pérdidas de balón protestadas y la respuesta en sendos triples de Jacob Round que llevaron la euforia a la grada, seis puntos in extremis para igualar a 69.

Llegaba el tiempo suplementario con los salmantinos lanzados y ambiente de derrota anticipada en el banquillo de Aquimisa Zamora, que ya se había visto con la victoria en el bolsillo. Ehigitor abría la cuenta charra y Moreno enchufaba un triple letal justo tras una doble opción marrada por Zamora. No le salía nada al equipo de Saúl Hernández, perdido además en protestas a la pareja arbitral. Pero en factores como el rebote, 43 los locales por 30 de Aquimisa, también se acabó de desnivelar la contienda para un Quesería La Antigua CB Tormes que se reivindicó ante uno de los mejores conjuntos de la liga. Al final, siete abajo, y Aquimisa que pierde el liderato, pero sigue en un emocionante paquete de cuatro equipos en cabeza con cinco victorias y tres derrotas.

El entrenador del Aqumisa Queso Zamorano, Saulo Hernández explicó el fatídico final del partido: "Tomamos malas decisiones defensivas al final y ellos nos penalizaron con acierto y eso nos hizo tirar por la borda el buen trabajo de los 38 minutos anteriores. Pero tenemos que quedarnos con lo bueno, aprender de esta derrota e intentar el domingo conseguir una nueva victoria". A su juicio, el Aquimisa ha mantenido "la esencia" de su juego en las victorias anteriores, "aunque hemos tenido un poco menos de acierto, pero con la plantilla tan corta que tenemos, sufrimos los partidos entre semana. Hemos ido ganando a falta de un minuto en casa de un equipo muy competitivo como son todos y no hay más que ver los resultados que se están produciendo".