El alemán Patrick Lange se proclamó ayer campeón del mundo, por segundo año consecutivo, en la prueba de Ironman disputada en Kailua-Kona (Hawái, Estados Unidos), con un tiempo de 7h 52:39, crono que supone un nuevo récord pues nadie había bajado hasta el momento de 8 horas.

El de Bad Wildungen (Hesse, Alemania) entró en la tercera y última prueba (maratón, 42,195 kilómetros) con más de seis minutos de desventaja respecto al primer clasificado tras terminar la especialidad de ciclismo, el australiano Cameron Wurf.Y aprovechó su mejor ritmo en carrera -no en vano es el poseedor del récord de maratón en Hawai desde 2016, 2h 39:45- para remontar posiciones e imponerse en la línea de meta con el espectacular logro de bajar de las 8 horas por primera vez en las 40 ediciones de la prueba.

Los registros de Lange fueron 50:37 en los 3,8 kilómetros de natación, 4h 16:05 en los 180 de ciclismo y 2h 41:31 de atletismo. Sus compañeros en el podio fueron el belga Bart Aernouts (7h 56:41) y el británico David McNamee (8h 01:09). Los españoles Javier Gómez Noya (8h 11:41) e Iván Raña (8h 27:52) fueron undécimo y vigésimo quinto, respectivamente.

En féminas, la suiza Daniela Ryf logró su cuarto título consecutivo de campeona del mundo.