Pudiera resultar tópico pero en todo caso fue muy cierto. El MMT Seguros Zamora consiguió ganar sobre la bocina en feudo del BM Villa de Aranda con un siete metros de Ceballos a dos segundos de la conclusión, tiempo en que los burgaleses volvieron a atacar y anotar de nuevo, pero décimas después de que se escuchara el bocinazo final. El equipo de Leo Álvarez jugó un partido muy serio en el que fue de menos a más, comenzando con muchos problemas ante la tres tres local para acabar la primera mitad claramente por delante y dominar durante el segundo acto, aunque a falta de cinco minutos y con una ventaja holgada se atascó y a punto estuvo de pagarlo muy caro.

Ninguno de los dos equipos falló en su primera intentona sobre la portería rival pero no tardó en desequilibarse el choque. La 3-3 local robó un balón y en la contra, Abalós sufría la primera exclusión del partido. Dos acciones que permitieron al Villa de Aranda ponerse por delante en el marcador. Una posición que afianzó gracias a las paradas de Amérigo tanto desde los siete metros ante Octavio como frente a Jortos al líimite del pasivo.

Sin facilidad para ver puerta, el MMT Seguros trataba de mantener el tipo en defensa, aunque una nueva inferioridad (ahora por exclusión a Fernando) facilitaba a los burgaleses ampliar diferencias con un 6-2 al paso por el minuto diez de partido que forzaba a Leo Álvarez a pedir tiempo muerto.

De vuelta a pista, el MMT Seguros se estrelló de nuevo contra la abierta defensa local. Sin embargo, el desequilibrio de fuerzas duró lo que Dalmau y Ceballos tardaron en ver por segunda vez puerta. Dos goles que mantenían a los zamoranos en la pelea y daban un respiro a un cuadro zamorano que volvió a quedarse con uno menos por exclusión a Jortos.

El capitán zamorano no tardó en ver la segunda exclusión, precedida por los primeros dos minutos al Villa de Aranda. Sin embargo, en los instantes más complicados el MMT Seguros encontró la forma de echar por tierra la defensa local.

Con un parcial de 1-6 para conseguir empatar el resultado, el cuadro de Viriato se vino arriba. Guiados por un Dalmau en estado de gracia en el lanzamiento, el MMT Seguros daba réplica siempre a su rival pudiendo, además, llevar la manija del choque. Incluso en los minutos previos al descanso, jugados a toda velocidad con muchas imprecisiones en ambos bandos. Un tramo repleto de pérdidas de balón y faltas en ataque que Ceballos, Cubillas y Dalmau hicieron positivo para los suyos, que alcanzaron el descanso con dos goles de ventaja (13-15).

Pese a que Barrientos y De Vega se enzarzaron en un bonito duelo bajo palos, los dos goleadores de ambos conjuntos, Nico López y Dalmau Huix, comenzaron la segunda mitad siendo los primeros en ver puerta. No tardó en verse claramente que el MMT Seguros mantenía la inercia del final de la primera parte y el míster local Juan Mofreno debió pensar lo mismo porque no tardó en agotar un tiempo muerto cuando el tanteo era de 15-18.

El receso no evitó que Dalmau siguiera hurgando en las indecisiones locales y, al poco, el catalán ponía una nueva máxima en el partido (15-20, m. 40). Los zamoranos tenían al Villa de Aranda dominado, sumido en sus nervios y obsesiondo con un Barrientos que pasaba por su mejor mmomento en pista.

Entró entonces del duelo en una fase de ataques largos y pausa con el MMT Seguros marcando el compás y dominando el luminoso. Con buen trabajo defensivo y acierto desde los extremos, la renta subió a seis goles (19-25, m. 49) y se estabilizó en cuatro tantos poco antes de encarar la recta final del duelo (22-26, m. 55). Minutos que fueron los peores de los zamoranos. Y es que, con la victoria prácticamente en el bolsillo, los de Leo Álvarez empezaron a perder un balón tras otro.

El leonés paró el partido pero su equipo se empecinó en seguir tomando malas decisiones en pleno correcalles, un escenario perfecto para un Villa de Aranda que gol a gol fue aumentando sus posibilidades hasta creerselo. Un gol de su meta, De Vega de portería a prtería a falta de dos minutos, dejaba el duelo en el aire y a los burgaleses lanzados en busca de la remontada (25-26). Una vuelta al guión del choque que llegaron a acariciar pues el MMT Seguros perdió el siguiente balón y Nico López, hizo el empate.

Sin embargo, restaban diez segundos de partido y el MMT Seguros no iba a renunciar al premio a su trabajo fácilmente. Así, con una gran jugada, Ramiro sufría un claro penalti para que Ceballos, desde los siete metros, decantara el duelo en favor de los zamoranos, impidiendo la bocina un nuevo empate burgalés. Una acción que pudo empañar el buen trabajo pistacho en Aranda, donde dio un paso más en su reconstrucción.