El Desguaces Casquero regresó a Benavente con una derrota en su primer partido amistoso de su pretemporada. El Magna Navarra hizo buenos los pronósticos y se impuso con claridad a los blanquiazules si bien el 12-1 final resultó un marcador excesivamente negativo para los méritos realizados en cancha por los hombres de Chema Sánchez.

Si bien Magna Navarra es un clásico dentro de la Primera División y cuenta con una plantilla de gran calidad, el sábado se dejaron notar sobre la pista las tres grandes ausencias con las que acudía el Desguaces Casquero a Pamplona. Sin Sergio Simón, Sergio Hernández y Charlie, el cuadro blanquiazul tuvo difícil seguir el ritmo de los locales y, de ahí, la abultada la goleada final. Así lo entendía Chema Sánchez que, al final del partido, se mostraba optimista pese al 12-1. "Hemos competido bien dentro de nuestras limitaciones", indicó, consciente del nivel de su adversario y de las circunstancias con las que el equipo afrontó el choque.

"En ningún momento hemos dejado de competir y de luchar y, por eso, nos vamos contentos pese a todo", explicaba el técnico de un Desguaces Casquero que mostró muy buena imagen durante el tiempo que le aguantaron las fuerzas como demostró durante los primeros ocho minutos de juego en los que imperó el 0-0.

Muy diferente resultó la segunda mitad para los blanquiazules. Un periodo en el que los jugadores se mostraron tremendamente cansados. "Se nos hizo largo el partido porque nos queda mucho por trabajar físicamente", analizó Chema Sánchez al respecto, reconociendo que en ese momento Magna Navarra resultó imparable pues "cuentan con varios jugadores que son o han sido internacionales" y su calidad ante un rival mermado marca -y mucho- las diferencias. Un desequilibrio en el juego que se plasmó en el 12-1 final, siendo de Joselu el tanto blanquiazul.

Primer paso pues de un Desguaces Casquero que tendrá ocasión de demostrar las lecciones aprendidas en este duelo el próximo sábado 25 en pista del Leis Pontevedra.