Lo peor del partido de esta tarde entre el Zamora CF y el Salmantino fue la fecha. Aún quedan más de dos semanas para que comience la liga y esto puede dar muchas vueltas, pero el equipo rojiblanco exhibió de nuevo un enorme potencial. El conjunto de Carlos Tornadijo dio una lección de orden que pudo culminar con victoria gracias a uno de los recursos de lujo que posee este año: el de Murci, que cabeceó a la red un servicio desde la banda de Sergio García.

El ex del Salmantino decidió un encuentro equilibrado, intenso y que congregó a unas mil personas en el recinto del CD Morales del Vino, organizador del amistoso. El campo de pruebas sirvió para que el Zamora saliese con un once con muchos teóricos titulares. Con Sergio García por detrás de Murci y Dani Hernández y Garban en los costados, el equipo rojiblanco tuvo las mejores opciones para adelantarse en el marcador en el arranque, pero se topó con el portero o con sus propias imprecisiones a la hora de culminar las transiciones.

La más clara del primer acto fue para Garban, al filo del minuto diez. El extremo aprovechó un error de sus excompañeros para plantarse solo en la frontal, pero el disparo le salió demasiado centrado y el guardameta puso los puños para evitar el 1-0.

El resto tuvo poca chicha. El Zamora se ordenó sin encerrarse, cedió mucho balón al Salmantino y exhibió una más que aceptable seguridad. Los visitantes apenas inquietaron, con la pareja Juanan - Carlos Ramos bastante atinada en la medular. Tampoco dejaron espacio al error Chete y Asiel unos metros por detrás y Villanueva no tuvo que intervenir. Quien más sufrió fue Fer, todavía en proceso de adaptación al lateral derecho.

Tras la reanudación, Tornadijo mantuvo el once y los rojiblancos tardaron poco en ponerle firma en forma de gol al buen trabajo realizado antes del paso por vestuarios. Una de las parejas más temibles de la categoría fue la encargada de fabricar el tanto. Sergio García para Murci y cabezazo certero del nueve por encima del portero. No hizo falta más.

Lejos de arredrarse tras el 1-0, el Zamora siguió tuteando a un Salmantino que mejoró con los cambios, pero que no logró acogotar a un equipo rojiblanco, que siguió llegando. También cuando Tornadijo movió seis fichas y tocó el sistema para situar un trivote con Juanan, Pipi y Ramos en el centro.

De hecho, al poco de realizar las permutas, uno de los nuevos, David Álvarez, tuvo la más clara, pero cruzó el balón en exceso ante la salida del portero. Tampoco atinó Sousa en el otro lado, a un cuarto de hora para el final. Más bien se topó con Pipi y con su intuición para estar siempre donde va la pelota. Esta vez, en la línea de gol.

Con el paso de los minutos, el Zamora se vio obligado a dar un paso atrás, ya con los juveniles Chechi, Jesús y Peralta corriendo en lugar de los fatigados Juanan, Dani y Garban para defender el resultado. No hubo sobresaltos. Los rojiblancos ganaron, mostraron una imagen de equipo poderoso y siguen dando pasos hacia un campeonato en el que aspiran a todo.