Los grandes aficionados al baloncesto siempre tienen un ojo puesto en la NBA y, allí, en la mejor liga del planeta, la parte más dura del cuadro por el título siempre es la perteneciente a la mitad de la liga conocida como Conferencia Oeste. Por ello, durante muchos años se le pudo el calificativo de salvaje. Esa división geográfica, Este y Oeste, estará presente también este año en la Liga LEB Plata tras la reestructuración ejecutada por la FEB. Una separación que llevará al CB Zamora a afrontar una de las ligas más complicadas de los últimos años en la categoría. Una competición que se presenta tan exigente y "salvaje" -a su nivel- como su homónima americana y que la entidad zamorana afrontará con sus armas de los últimos años.
El proyecto del CB Zamora volverá a estar cimentado en tres figuras fundamentales: Aquimisa Laboratorios, Queso Zamorano y Saulo Hernández.
Los dos patrocinadores, vitales en las últimas temporadas para que Zamora disfrute de la LEB Plata, renovaron su compromiso con el club y volverán a dar nombre al equipo de la ciudad durante la campaña 2018-2019. Será la octava temporada que Queso Zamorano figurará en la camiseta del CB Zamora y la tercera de Aquimisa Laboratorios, siendo este último patrocinador importante por la vinculación con el equipo salmantino de Liga EBA que unirá a cuatro jugadores con la entidad zamorana. Hombres como Gabriel Román o Xabi Arriaga, que ya contaron con minutos el pasado año.
Pero, sin duda, el arma más importante que mantiene el CB Zamora en su poder para hacer frente a la dura Conferencia Oeste es su técnico, Saulo Hernández, el gran baluarte del club.
Será la octava temporada de Hernández al frente del primer equipo del CB Zamora, al que ha dirigido cinco años en Liga EBA y dos en LEB Plata. Un hombre de la casa, con experiencia tanto dentro como fuera de la pista que, sin embargo, tiene por delante un reto nuevo y singular con la división de la Liga LEB en dos conferencias de doce equipos.
Hernández se muestra ilusionado de cara a un desafío que se presenta realmente duro. Una realidad que no escapa a nadie cuando se echa un vistazo al calendario. "Para comenzar, la primera semana, disputaremos tres encuentros. Será una liga muy exigente físicamente debido a la proximidad de fechas", indicó ayer el técnico que extrajo otras interesantes conclusiones acerca del nuevo formato. "Este año, cada partido tendrá gran valor. Será importante porque los resultados de la primera fase cuentan de cara a la segunda y, hasta las últimas jornadas, no sabes qué equipo te acompañará o si lucharás por ascender o descender, eso hará que cada duelo pueda tener gran repercusión. Además, al haber tantos partidos juntos, las rachas pueden dar lugar a cambios bruscos en la clasificación semana tras semana", indicó Hernández.
El técnico es consciente también del alto nivel que habrá en el Oeste "donde estarán los dos equipos descendidos de LEB Oro" y que la composición del torneo y los rivales obligarán a "desarrollar una pretemporada más seria y larga que en ocasiones pasadas". Por ello, tanto Saulo Hernández como la directiva del CB Zamora se han puesto manos a la obra para configurar cuanto antes la plantilla. Un conjunto que, según informó ayer el club en nota de prensa, podría cerrar en los próximos días una renovación "importante e ilusionante". Una ilusión que se tratará también de transmitir a la campaña se socios cuya fecha de inicio está prevista para el 26 de agosto.
