La 101 edición del Giro de Italia que se disputa desde este viernes hasta el día 27 presentará un recorrido peculiar, con el comienzo inédito en Jerusalén y la llegada a Roma en vez de la habitual de Milán. Entre medias cimas emblemáticas, como el Zoncolán, siete llegadas en alto y dos etapas contrarreloj que suman 44 kilómetros.

La carrera rosa pasará a la historia de las grandes vueltas al situar por primera vez el punto de partida fuera del territorio europeo. Lo hará en Israel, con una crono inicial de 9,7 kilómetros en Jerusalén

Miles de personas se agolpan en las calles de Jerusalén desde la mañana, en un día especialmente caluroso para esta época del año, en espera del gran acontecimiento: 176 ciclistas de 22 equipos, entre los que se cuenta por primera vez un equipo israelí.

La contrarreloj comenzará en la parte oeste de Jerusalén, en un recorrido de 9,7 kilómetros, dejando fuera la parte oriental, considerada por la comunidad internacional territorio palestino ocupado desde 1967 y que Israel se anexionó en 1980.

Después el pelotón afrontará las dos primeras etapas en aquel país, idóneas para los esprinters, antes de saltar a Italia y disfrutar el primero de los tres días establecidos de descanso.