Era una de las jóvenes promesas más importantes del piragüismo zamorano, a la estela de Emilio Merchán, intentando hacerse un hueco en las portadas que copaban también Eva Barrios, Laura Pedruelo o Carlos Garrote. Fue creciendo como la espuma, bien aconsejado por un gran campeón y eso le llevó hasta la cima en Gyor, hasta la medalla de oro en casa de los húngaros por delante de dos de ellos, a ganar el Campeonato del mundo en categoría sub-23. Había nacido otra estrella en las aguas del río Duero, Alejandro Sánchez se hacía mayor.

Alejandro era el último de una gran estirpe de piragüistas zamoranos, tan acostumbrados a los laureles, a los triunfos, a trabajar incansablemente en las aguas del Duero para que en las grandes citas siempre la seña bermeja acabara ondeando, que esa presión pudo con él cuando se unieron otros problemas fuera del agua. Necesitaba parar para volver a ser Chelín, Joselito, Alejandro Sánchez.

Borrón y cuenta nueva después de un 2017 que, pese a ser de transición, dejó para él algún triunfo como la Regata Internacional de Sanabria o un quinto puesto en el Campeonato de España. Dos pruebas de calibre, dos días en los que estuvo entre los mejores, mostrando que seguía siendo un gran campeón pese a que la competición internacional no le guardó un hueco para batirse el cobre entre los mejores del piragüismo de larga distancia.

"El año pasado no competí al nivel de otros años porque estaba un poco cansado y necesitaba un tiempo de descanso" explica Alejandro Sánchez con la ilusión del que vuelve a empezar y se sabe con fuerzas para darlo todo en la cita que tendrá la próxima semana en la Copa de España de maratón

Después del año de parón, especialmente a nivel mental, Sánchez está preparado para dar guerra desde el próximo fin de semana: "Este año he decidido volver otra vez a la alta competición e intentar probar suerte ahora en la Copa de España que es clasificatoria para el Europeo y un poco de preparación para el Campeonato de España que será en agosto y que será clasificatorio para el Mundial en Portugal".

El Mundial como objetivo para un campeón del mundo, para un hombre que quiere volver a sentir entre sus palas el agua de Vilaverde, el mismo lugar en el que el zamorano conquistó un título internacional: su primer Europeo.

"Estoy preparado para competir en la Copa de España pero estoy al 80% aunque cuento con conseguir la clasificación para el Europeo" expone el palista zamorano quien, pese a todavía llegar algo corto de forma, confía en meterse en la pomada desde el inicio y volver a sentirse importante después de un 2017 complicado.

"El año pasado competí en el Campeonato de España pero no iba en la forma de otros años ni con las ganas ni la motivación necesaria. Estoy un poco más motivado este año, más activo en entrenamientos y tengo ilusión de conseguir algo positivo" cuenta Sánchez, quien se ve en los primeros puestos, lo que le permitiría conseguir un billete para el Campeonato de Europa y volver así a la competición internacional.

Pontevedra es el lugar elegido para que Alejandro Sánchez vuelva a ser el que ya ha demostrado ser muchas veces.