El Zamora consiguió llevarse los tres puntos a domicilio ante el Real ÁvilaReal Ávila en un vistoso encuentro en el que sacó buen partido a los dos goles logrados en los primeros 25 minutos que le permiten mantenerse invicto en sus visitas al Adolfo Suárez en Tercera División.

El primer susto lo dio el Ávila con una acción de De Mesa que obligó a emplearse a fondo a Yon, con un corte providencial en un un "mano a mano" con el portero, cuando apenas había arrancado un partido en el que el Real Ávila volvía a dejar la sensación de empezar muy bien asentado sobre una defensa siempre un paso por delante de Silveira.

Tras una recuperación en el centro del campo -minuto 6- Llorián lanzaba un latigazo que no encontraba portería, aunque enviaba un claro mensaje de peligro.

No se amilanó el Zamora, que un minuto después respondería de la mano de Javi Bueno con un disparo que provocó una buena reacción de Julen que tocó la pelota lo justo y el larguero terminaría rechazando el balón.

Empezó mandando el Real Ávila sobre el césped pero en el marcador lo haría el Zamora, que convertía una contra en una clara oportunidad. Llegó tarde Piscu, lento e impreciso, derribando a Diego Ortiz en el recorte. Penalti claro y claro que transformó en el 0-1 Dani Hernández con un disparo duro, a la escuadra, imparable para Julen en el minuto 13.

Buscaba reponerse el Real Ávila, pero de nuevo un error de Piscu le costaría muy caro al central y al equipo. En una acción aislada, sin peligro, una mala cesión del central supondría el 0-2. El cuero se quedaba corto y Dani Hernández, muy atento, robaba la cartera a Julen, que tuvo que salir a la desesperada. Buen recorte del '7' para disparar a portería vacía y hacer el 0-2 antes de la media hora de juego.

Pudo llegar el 0-3 en la mejor jugada de los zamoranos cuando Silveira sacaba de sitio a Piscu y, con una buena pared, dejaba solo a Javi Bueno que, en clara posición de remate, disparaba por encima del larguero.

Tenía trabajo por delante el Real Ávila en la segunda mitad si quería, al menos, igualar el duelo. Pero no especuló, al menos de inicio, el cuadro de Tornadijo.

El Real Ávila dio un paso adelante por los laterales. Josito empezó a mostrarse como una vía de escape. Probaron suerte Rubén Ramiro y Modia desde fuera de área -minuto 52- pero no encontraron la portería de Juan Berlana. Los centrales zamoranos no llegaron al remate de Piscu cuando el central -minuto 55- se elevó en una falta botada por Llorián pero su cabezazo, potente, se marchó fuera.

Buscaba el 1-2 el Real Ávila pero lo que pudo llegar fue el 0-3 cuando Dani Hernández se midió en velocidad con Oli por banda para servir al hueco en la frontal, donde Diego Ortiz llegaba con claridad para rematar. El portero salió con todo, se le arrugó la pierna a Ortiz, que se lo repensó dos veces.

Buscó más mordiente Miñambres y cambió a Edu por Caballero, lateral por delantero. Se rehizo el equipo cambiando de dibujo. Buscaba una solución el técnico leonés, que no lo veía claro. Ni con la ayuda de Saúl, que empujaba a Raúl -minuto 67- cuando el encarnado buscaba el remate. Penati claro. La ajustó Rubén Ramiro al palo, pero le leyó las intenciones Juan Berlana, que detenía el cuero junto al palo en el que ya era el sexto penalti fallado por los encarnados este curso.

Sin embargo la tarde volvería a ofrecer una segunda oportunidad a los abulenses en el primer error de la tarde de Juan Berlana. No llegó al despeje y arrolló a Josito cuando quiso rectificar. Esta vez -minuto 77- sería Raúl el encargado de lanzarlo. Lo hizo por la vía rápida. Disparo duro, centrado. La tocó Juan, que pudo engordar las tétricas estadísticas de los encarnados, pero no fue suficiente. Era el 77' y con el 1-2 el partido tomaba otro color.

Oli y Rober, en un duro disparo desviado a córner, amenazaron con el empate. Se veía capaz el Real Ávila. Perdía tiempo el Zamora, que veia peligrar el premio, que en dos acciones consecutivas estuvo a punto de alcanzar. Primero una gran mano de Juan Berlana y la cepa del palo impedían que el disparo de Rubén Ramiro -minuto 87- se convirtieran en gol, y tras el saque de córner, era Edu el que se encontraba con el larguero cuando quiso rematar con el pecho. La madera impedía un empate para el que ya había hecho méritos sobrados el Real Ávila, pero los locales tuvieron que ver como su arreón final no servía para encontrar el premio del gol.