El Zamora CF ha conseguido en los últimos meses estabilizar su deuda, que a 31 de diciembre de 2017 se cifraba en 187.836 euros. Así lo exponía el propio club en su página web, explicando, no obstante que esa es una deuda "neta", en la que no se incluyen 111.497 euros que tienen "pendientes de cobro", aunque en la entidad admiten que es una cantidad que difícilmente verán ingresada en sus arcas.

El motivo, según la versión facilitada a este periódico por la junta directiva, es porque son cantidades correspondientes, en su mayoría, a publicidad y que se arrastran desde la temporada 2011-12, por lo que prácticamente se dan por perdidas. En caso de no ingresar ese montante la deuda del club alcanzaría los 299.333 euros, aunque los mandatarios confían en no llegar a esos números rojos a final de temporada.

La realidad publicada por los actuales responsables es la de final de año. Se pasó de deber 183.377 euros a fecha de 30 de mayo, a los 187.836 del 31 de diciembre, una variación de apenas 4.000 euros.

La situación, según reconoce la junta directiva, ha variado en las últimas semanas y, a día de hoy, los únicos ingresos que quedan son de las taquillas y otras iniciativas que puedan llevar a cabo puesto que, al parecer, ya tienen todas las ayudas cobradas.

Asimismo también asegura la directiva que los cambios en el cuerpo técnico -destitución de LosadaLosada, a marcha del segundo entrenador y la llegada de Tornadijo y su equipo- y en la plantilla -baja de Aires y altas de Yon, Zazas y Carlos Ramos- no tuvieron una repercusión grave en el presupuesto y se asegura que el incremento en la partida de nóminas es de tan solo 2.590 euros.

Con todo, desde el 1 de julio a 31 de diciembre los gastos de la temporada 2017-18 han sido de 293.747, además de 101.577 correspondientes a cursos pasados, lo que hace un gasto semestral de 395.325 euros.

En el capítulo de ingresos se inyectaron de julio a diciembre 277.000 euros correspondientes a la actual campaña y 69.500 de cursos pasados, lo que hace un total de 346.572 euros.

En la parte más negativa hay que situar que no quedan subvenciones por llegar y ya se ha consumido la mayor parte del presupuesto de 457.781 euros aprobado en asamblea.

En otro orden de cosas, en el plano deportivo el equipo está inmerso en los entrenamientos para afrontar un mes vital para sus intereses con tres enfrentamientos clave: Unionistas, Salmantino y Arandina.

El entrenador, Carlos Tornadijo, aseguró que hay que dar por bueno el punto ante el Uxama (1-1) y ahora ir a por la victoria ante el Unionistas que ha demostrado que no es inmortal. De nuevo tendrá donde elegir en su plantilla y admite que, a pesar de que algunos se están quedando fuera de la convocatoria, cuenta con todos ellos para un último tercio de competición en el que (sin pronunciar la palabra play-off) no renuncian a nada. Además confesó que ha tenido charlas con los futbolistas que menos están participando últimamente para exponerles lo que en el cuerpo técnico quieren y necesitan de ellos.

Por otra parte, en el partido jugado en la tarde de ayer, el cuarto clasificado, el Salmantino, cayó derrotado en Almazán por 2-1 en el partido aplazado en su día por la nieve.

De esta forma, el equipo rojiblanco se mantiene a seis puntos de la fase de ascenso.