El Zamora CF pasó, casi en una década, de luchar en el barro de la Tercera División a jugar un partido oficial en el Camp Nou, tal y como relataba la peña "La Polla Rojiblanca" en un largometraje en el que se explicaban las andanzas del club rojiblanco en los últimos años, culminados jugando un encuentro oficial en el campo del, por entonces, mejor equipo del mundo.
Si la ascensión del Zamora CF fue meteórica, pasando de ser un conjunto habitual en la Tercera División a ganarse un nombre importante en los "play offs" de ascenso a Segunda, la caída del club de la Perla del Duero ha sido de igual forma ha sido fugaz y en doce años ha pasado de disputar un encuentro de Copa del Rey contra el FC Barcelona a jugar en liga frente al CD Becerril.
Y es que hoy se cumplen doce años del partido de los rojiblancos en el coliseo blaugrana en el que fue uno de los partidos más recordados en la historia zamorana y a la par también una de las historias más dantescas del Zamora, teniendo en vilo a todo el fútbol español hasta escasos minutos antes del inicio del partido.
La niebla que estuvo a punto de dejar a los zamoranos en tierra, apostados en el Aeropuerto de Matacán parece un símil perfecto de la bruma que iba a ir envolviendo, cada vez más, al club en estos doce años.
Después del Camp Nou el Zamora siguió rozando el ascenso a Segunda División, especialmente en Vallecas, pero poco a poco se iniciaba la auto aniquilación de los rojiblancos, incapaces de dar el salto con el dinero que dejó el Barça e impasibles ante el descenso de aficionados en sus gradas desde los 4.000 que solían acercarse al Ruta de la Plata, hasta los 1.000 que actualmente viven los encuentros cada domingo.
Después de años de tranquilidad institucional, en los últimos doce años han pasado por el sillón de mando José María Casas, Manuel Tejedor, Simón García Taboada, Maxi Martín, Isaac Macías, Segismundo Ferrero y Didia Liedo. De igual forma, el banquillo zamorano ha conocido a varios inquilinos desde Raúl González, que es quien había cogido al equipo tras la destitución de Baltasar Sánchez "Balta", pasando por la vuelta de Tomé, el paso efímero de Ricar o Beto Bianchi, la llegada de Iñigo Liceranzu, los cuatro años de Roberto Aguirre y de nuevo la vuelta de Balta antes de que Miguel Losada fuera el técnico rojiblanco en Tercera División hasta que hace unas semanas volviera Carlos Tornadijo.
Los zamoranos, habituales en los "play off" de ascenso a Segunda División, fueron perdiendo pujanza hasta luchar por no descender y acabar de nuevo en el pozo de la Tercera División, especialmente marcados por una deuda institucional que cumple una década y que marca la agenda social y deportiva de un club que en doce años ha pasado de jugar en el Camp Nou a intentar sacar las castañas en casa del Becerril.
