La defensa del Virgen de la Concha volvió a costarle caro al equipo dirigido por Nacho González y tras una primera parte en la que encajaron 50 puntos,los amarillos consiguieron ir frenando las canastas fáciles del rival y a base de acierto en el triple igualar la contienda.

El rebote fue el gran protagonista de una primera parte en la que los zamoranos siempre estuvieron condicionados por las faltas que mandaron al banquillo a Alí y a Bosa. El Estudiantes de Lugo mandó bajo los aros y dobló a los zamoranos en este aspecto, lo que les permitió segundas oportunidades que llevaban a ventajas por encima de los diez puntos que los locales se afanaban en reducir.

El cuadro amarillo se puso, incluso, por delante al inicio del último periodo cuando parecía que mantenían una inercia positiva que les llevaría a sumar una nueva victoria pero en los instantes finales se le atragantaron las posesiones en ataque y pese a tener varios balones para llevar el partido a la prórroga, acabaron cayendo en un Ángel Nieto que les volverá a recibir el próximo miércoles en busca de la primera victoria en casa.