El Zamora CF ha cogido oxígeno tras conseguir una obligada victoria ante el San José de Soria, último clasificado del Grupo VIII, pero que volvió a demostrar que en su campo no es un enemigo sencillo ya que sigue acumulando derrotas por la mínima.

El equipo rojiblanco fue superior durante la primera parte, y tras el descanso consiguió el gol al que supo sacar rendimiento sin pasar demasiados apuros hasta el final.

El San José sigue sin levantar cabeza y encajó su décima derrota consecutiva. Desde el primer minuto se vio con más intensidad y ganas a los visitantes que venían de sufrir un inesperado empate en casa ante el Burgos Promesas que le llevó a la novena posición de la clasificación.

El equipo de Miguel Losada tenía la posesión del balón y las ocasiones, algunas hasta por partida doble. El Zamora lo intentó con Iñaki Eguileor pero respondió bien el guardameta del San José, José Ángel, y poco después con Aleixo al que el balón le cayó franco a los pies pero su disparo se marchó alto.

El San José está atravesando su peor etapa y eso que acaba de comenzar la temporada pero el fútbol que intentan los sorianos no tiene nada que ver con el que realizó la pasada campaña ya que mientras el campo de San Juan era donde lograban la mayoría de los puntos, este año la desazón, mala fortuna y sobre todo el aspecto psicológico está haciendo mella en el equipo colegial. No pisaron con claridad el área de Miguel los sorianos, probando la escasa fortuna con disparos excesivamente lejanos sin peligro alguno.

El Zamora lo intentaba tocando pese a las malas condiciones del terreno de juego, por lo que en determinadas fases del encuentro recurrió a los balones en largo que llevaron más de un susto a la parroquia local. Pocas intervenciones, por no decir ninguna, tuvo que realizar Miguel, si bien su peor jugada estaría por venir ya que molestias musculares que habrá que calibrar durante la semana le obligarían en la segunda parte a ceder su puesto al compañero Juan Berlana. Sin ocasiones por parte del San José, los nervios del Zamora pasaban por meterle mano a un equipo que se veía inferior y claramente superable en ámbitos futbolísticos pero al descanso se llegó con empate a cero, con los jugadores del San José pensando que por qué no sería la tarde donde poder puntuar y no tener el cero en la casilla de los puntos y el Zamora, nervioso por sumar tres puntos importantes.

Tras la reanudación, pese a seguir con el marcador inicial, Miguel Losada realizó un doble cambio por sendas lesiones ya que, tanto Miguel como Roberto Levas, se quedaron en la caseta por molestias en el menisco y una contractura muscular, respectivamente.

Iban cayendo los minutos y se veía que en caso de llegar el gol sería del lado del Zamora, como finalmente fue. Un buen centro de Dani Hernández tras una gran jugada personal fue rematado por César Simón de cabeza, ante la mirada de la defensa del San José y la desesperación de los sorianos que veían cómo una jornada más se irían del partido sin estrenar su casillero particular de puntos.

A la desesperada, buscando la heroica el San José intentó quemar sus naves pero este año tiene mala suerte hasta con las lesiones ya que su jugador Borja, tuvo que dejar el terreno de juego.

Pasaban los minutos y pese al marcador corto la victoria del Zamora no parecía peligrar. Losada gastó los cambios dando entrada a Silveira quitando del césped a Dani Hernández. Cinco minutos de descuento que parecían eternos, a unos por mantener el resultado y a otros por ver como diez partidos después seguían como farolillo rojo del grupo octavo de la Tercera División.

El Zamora acumula dieciséis puntos, un tanto distanciado de la zona noble de la tabla pero con mucho margen de mejora todavía y jornadas por disputar. El San José sigue pensando en la fórmula mágica que le haga mejorar en juego pero sobre todo en resultados.

Con este resultado los rojiblancos vuelven a acercarse a los puestos de "play off" y deberán vencer, la próxima semana, al Numancia B si quieren mantener la racha y comenzar a dar sensaciones de equipo fuerte que puede luchar por las posiciones de privilegio en el Grupo VIII de Tercera División.