El MMT Seguros está lejos de encontrarse al cien por cien, algo bastante lógico tiendo en cuenta que se encuentra a mitad de su pretemporada. Pero, a pesar de la alta carga de trabajo en los entrenamientos y que cada partido amistoso que dispute no deja de ser una simple prueba que utilizar para encontrar y corregir fallos, se puede llegar a intuir que el equipo avanza por buen camino en su trabajo. Una deducción que se convierte en excelente noticia cuando se trata de analizar a la primera línea de los zamoranos.

No es ningún secreto que el juego de los "Guerreros de Viriato" se basa en una férrea defensa y un ataque colectivo. Una ofensiva en la que, la mayoría de las veces, mucho tiene que decir la primera línea del cuadro pistacho. Una parte de su siete que, ahora mismo, se encuentra algo "coja" debido a dos circunstancias: las lesiones y la falta de incorporaciones.

García Valiente no ha podido contar desde el ascenso en Palma del Río con uno de sus hombres fuertes a la hora de buscar las cosquillas del rival como es Guille. El zamorano sigue lesionado y, aunque esté entrenando, se ejercita en solitario sin poder acumular minutos de competición. Una ausencia que, sin embargo, se ha "tapado" satisfactoriamente hasta ahora, incluso cuando a ella se ha sumado la falta de Jortos -cosa que ocurrió frente a BM Nava-.

Por ahora, las rotaciones y la colaboración del filial, han contribuido a minimizar la falta de una de las piezas claves en la circulación de balón del MMT Seguros. Un problema que también parece menor cuando, como ocurrió el miércoles en la Copa de Castilla y León, hombres como Adrián Prieto o Ander Iriarte ofrecen un alto nivel de juego y aprovechan cada minuto en pista para reivindicar su lugar en el siete pistacho.

Sin duda, el 23-24 con excelente labor de centrales y laterales ante BM Nava (potencial candidato a la Liga Asobal) deja intuir que pese a las bajas el equipo cuenta con mimbres para ser competitivo. Recursos que, sin embargo, el club lleva tiempo tratando de aumentar con el fichaje de un lateral que haga más fácil estos sobre esfuerzos en caso de lesión y que de otro salto de calidad más a una línea que, pese a todo, parece dispuesta a mantener el tipo.