Pocas horas restan para que en Nimes arranque una edición más de la Vuelta a España, una de las más prestigiosas competiciones ciclistas que para los aficionados zamoranos tendrá como principal aliciente comprobar hasta donde puede llegar su conciudadano Jaime Rosón, quien ya se encuentra en el punto de partida velando armas antes de medir fuerzas con los mejores hombres del pelotón.

El líder del Caja Rural RGA Seguros para esta ronda -y futuro activo del Movistar- es una de las firmes promesas del ciclismo español y se espera que tenga bastante protagonismo en una edición de la Vuelta a España que antes de empezar ya está dejando múltiples noticias. Como, por ejemplo, la suspensión por parte de BMC del ciclista español Samuel Sánchez.

El ciclista asturiano fue suspendido "con efecto inmediato", según explicó el equipo BMC Racing, por haber dado positivo en un control antidopaje realizado fuera de competición el pasado 9 de agosto. Un análisis en el que, según notificó ayer la Unión Ciclista Internacional (UCI), la sangre del asturiano contenía alta presencia de la hormona GHRP-2, incluida en el listado de sustancias prohibidas.

De acuerdo con su "política de tolerancia cero", el equipo BMC decidió "suspender provisionalmente y con efecto inmediato" al corredor español, campeón olímpico de fondo en Pekín 2008. Una medida que aparta definitivamente a Sánchez de la Vuelta a España que arrancará mañana con la contrarreloj por equipos en suelo francés.

Por su parte, el ciclista español, declaró ayer ser el primer sorprendido por su positivo. "Ha sido una sorpresa total", expresó a los medios. "Los abogados me han dicho que no haga declaraciones porque hay que esperar al resultado del análisis de la muestra B. Se trata de un resultado adverso, no de un positivo, pero en cualquier caso para mí ha sido una sorpresa total, no me lo puedo creer", comentó el asturiano, que argumentó "Tengo 39 años, llevo 19 de profesional y estoy a punto de retirarme, ¿para qué me iba a meter en esto?".