Cuatro días, cinco etapas y 469,1 kilómetros. Esos son, a grandes rasgos, los datos que definen el recorrido de la XXXIV edición de la Vuelta Ciclista a Zamora que dará comienzo dentro de poco más de dos semanas y que se dieron a conocer ayer por la organización encabezada por el C.D.C. Zamora. Un trazado que cuenta con todos los alicientes del ciclismo, desde jornadas propicias para el sprint a un duro final en alto pasando por dos etapas contrarreloj, una por equipos y otra llana. Un difícil examen para los ciclistas que arrancará en Villalobos el día 12 de julio y que pondrá su punto y final en la Plaza de Viriato, que se estrena como meta de la carrera.

La Vuelta a Zamora 2017 comenzará el martes 12 de julio con un clásico del ciclismo ahora algo en desuso: un doble sector. Primero, una contrarreloj por equipos de 13 kilómetros entre Villalobos y Villalpando donde se establecerán las primeras diferencias que, lejos de ser definitivas, podrían llegar a ser importantes a final de la ruta. Por la tarde, en cambio, el pelotón afrontará una etapa corta de 96 kilómetros entre las localidades de Tábara y Monbuey que, pese a su longitud, tiene un perfil quebrado y unos complicados diez últimos kilómetros en ascensión.

Entre Tola y Doméz discurrirá la segunda etapa, sobre un recorrido de 124,8 kilómetros, con una incursión en Portugal durante el primera tercio de la etapa. Se trata probablemente la más asequible de todas y propicia para gente rápida.

Esta etapa más asequible contrasta, sin duda, con el siguiente tramo de la Vuelta a Zamora que tendría lugar el viernes, la llamada como "etapa reina". De nuevo se saldrá del municipio de Mombuey, esta vez en dirección a la sierra occidental de la provincia, ya cerca de la frontera con Galicia. Línea que también se cruzará durante varios kilómetros. Serán cinco puertos: dos de 1ª categoría, uno de segunda y otros dos de tercera. El final tendrá lugar en el exigente Alto de Morouxal, gran juez de la carrera con unos 7,5 kilómetros al casi el 10% de pendiente media y con máximas del 17% hasta llegar al parque eólico.

Y si la general no está del todo aclarada, para el sábado la jornada final será tan corta como intensa. Una crono individual de 6,7 kilómetros con salida en Villaralbo y llegada a la Plaza de Viriato, en plena capital zamorana y un repecho final de un kilómetro que aumenta las posibilidades de que se hagan diferencias. Un final digno de una Vuelta a Zamora de lo más variada y atractiva para este julio de 2017.