Niki Lauda le había concedido un margen de cuatro carreras a Valtteri Bottas para que confirmara con hechos el haberse ganado el asiento en Mercedes. Y a la cuarta pasó el examen. El finlandés ganó ayer en Sochi la cuarta cita del campeonato por delante de los Ferrari de Vettel y Raikkonen y lo hizo gracias a una espectacular maniobra en la salida, en la que se comió a los dos cavallinos, y a pesar del terrorífico "planazo" de la vuelta 39 que le llevó a perder prácticamente toda la ventaja que tenía sobre Vettel y, con ello, a llegar hasta el final con el alemán soplando en su cogote.
En "modo defensa", con menos de un segundo de ventaja y sorteando doblados que lo mismo te ayudaban que te podían condenar, aguantó el finlandés una docena de vueltas para conseguir la primera victoria de su carrera y prolongar así el dominio de los Mercedes en Sochi, donde las "flechas de plata" han ganado las cuatro carreras que se han disputado. Pero ahí estuvieron una vez más los Ferrari confirmando su candidatura.
