Hay maneras de ganar y también de perder, como demostró ayer el Benavente cayendo con la cabeza muy alta en casa frente a un líder al que plantó cara hasta el tramo final de un partido que acabó 0-2 en favor de los charros.

No fueron de paseo los salmantinos a Benavente y con mucha seriedad planteron un partido de ritmo alto, buscando anotar desde el inicio ante unos locales que supieron defenderse de este primer agobio y buscar posteriormente sus opciones.

La labor de defensiva de todo el conjunto "tomatero" se reforzó con la excelente actuación de Luceño, que tenia intervenciones brillantes en disparos muy comprometidos. Acciones que evitaban el gol visitante y permitían a Castaño, en un remaqte tras internada de Mario, gozar de la oportunidad de abrir el marcador.

Los benaventanos maniataban el juego de creación visitante, buscando el Salmantino romper el 0-0 con el que se llegó al descanso con balones largos, incurriendo una y otra vez en fuera de juego.

La segunda parte en su inicio continuó siendo un calco de los primeros cuarenta y cinco minutos con los de Santi Redondo muy buen plantados, mientras el líder se estrellaba con la trama local.

Movían ficha los visitantes incorporando en la delantera jugadores de refresco que fueron los que al poco de entrar en el terreno de juego, fue Coque quien no perdona en su primera ocasión , al recibir un balón con fortuna tras dos rechaces de la defensa cruza el balón ante la estirada de Luceño.

El segundo gol sería muy poco tiempo después en jugada muy parecida y en esta ocasión es Nacho quien reciben el balón en el área pequeña y marca el segundo para su equipo.

No pudo reaccionar el Benavente, sin tanta pegada como el líder en la caseta debido al mermado plantel de jugadores del que dispuso su técnico. Prueba de lo cual fue el debut en los últimos minutos de hasta tres juveniles (primero Jorge, después Diego y casi en el final Carlos) que contribuyeron a la buena imagen pero no pudieron evitar la derrota.