Tres minutos aciagos en la segunda parte dieron al traste con las posibilidades de victoria del Amigos del Duero Caja Rural. Las de Samuel Merino se consiguieron adelantar en el marcador pasado el ecuador de la primera parte gracias a un buen gol de Zizu. Sin embargo, las locales anularon a las zamoranas durante la segunda parte a partir del fallo de Saritilla desde los once metros. A partir de ese fallo, dos goles en apenas tres minutos de Rocío, el segundo de ellos posiblemente en fuera de juego, llevaron a las de Sami Merino a la derrota. Era un partido muy importante y ambos equipos lo sabían ya que si la victoria se quedaba en Madrid, la zona de descenso se comprimiría mientras que si la victoria viajaba a tierras zamoranas, las de Merino podrían respirar y las de Getafe hundirse un poquito más en la clasificación. Por ello, los preparadores físicos, desde el calentamiento pedían a las suyas cien por cien de concentración y que estuvieran metidas en el encuentro desde el pitido inicial.

Intensidad inicial

La importancia del encuentro se notó desde el minuto uno. Ambas escuadras disputaban cada balón como si fuera el último y por ello no se pudieron ver muchas ocasiones de gol en estos primeros lances. Las nazarenas buscaban lanzamientos lejanos viendo la posición adelantada de Jimeno pero con escasa fortuna ya que ningún lanzamiento encontraba puerta. Es más, la primera ocasión fue amarilla, cuando Zizu remataba de cabeza un corner botado por Cynthia pero sin crear excesivo peligro a una Gema que estuvo tocada desde los 30 segundos de partido. Respondieron las locales cuando Villena de falta directa lateral estrelló el balón en el palo. Aun así, en estas idas y venidas llegó el gol zamorano. Zizu con gran calidad batía con una vaselina a Gema que nada pudo hacer. El gol hizo tambalearse a las getafenses que veían los mejores momentos visitantes. En el minuto 37, primero Cynthia y luego Saritilla pudieron abrir brecha pero se encontraron a una felina Gema que estuvo sensacional en ambas intervenciones.

Dos caras

La segunda parte tuvo dos partes muy bien diferenciadas. La primera llegó hasta el minuto 60 donde las de Merino siguieron controlando el tempo del partido y haciendo ocasiones, quizás no muy claras pero sí que inquietban a las locales. En una de ellas, en el minuto 56 llegó la jugada que fue un punto de inflexión en el encuentro. Zizu remataba una falta lateral botada de Pastor. Su remate golpeaba la mano de Yeni con lo que Vidal Tormo señalaba el punto de penalti. Saritilla lanzaba fuera la pena máxima cuando Gema ya se había vencido hacia el otro palo. A partir de entonces, el campo se volteó y las jugadas de peligro ya fueron solamente locales. Los cambios en las moradas dieron un frescor en el ataque que las visitantes no supieron contrarrestar. Arancha estuvo a punto de empatar en el minuto 65 pero su lanzamiento salió rozando el palo. Rocío fue la que no falló cinco minutos después. Angulo estuvo muy blanda en un despeje sencillo en área pequeña, aspecto que la avispada delantera del Alhóndiga no desaprovechó para batir a Jimeno. Tres minutos después, en un balón filtrado hacia Rocío, que podía arrancar en fuera de juego, fue aprovechado otra vez por la atacante local para dar la vuelta en el marcador y dejar el definitivo 2-1.