Zinedine Zidane, técnico del Real Madrid, descartó que su equipo esté "en crisis" pese a la mala racha de cuatro empates consecutivos, y señaló la falta de intensidad en los inicios de los partidos, como el principal punto a corregir.

"No estamos en crisis. La única cosa que tenemos que hacer, pensando que estamos en octubre, es no volvernos locos. Algo pasa seguro, porque cuatro empates seguidos, sobre todo tres en LaLiga cuando estás por delante con el inicio de temporada que hicimos, es duro, pero no voy a perder los papeles ni los jugadores tampoco. Lo que veo es que hay que meter más intensidad en los inicios de partidos, como antes hacíamos y últimamente no", admitió.

Zidane repitió el discurso del día del Villarreal, señalando la mala primera parte y la entrada en el partido como principal argumento, sin cuestionar la falta de estabilidad defensiva de su equipo ni el físico.

"Los partidos son 90 minutos y, últimamente, entramos muy mal en los partidos. Te meten un gol a los pocos minutos, además con un centro que hemos visto que ellos tenían esa posibilidad de hacer daño. Es difícil. Físicamente estamos bien, no podemos decir que sea físico, si vemos cómo acabamos. Yo, como responsable, tengo que buscar soluciones para cambiar esto", reflexionó.

"En un partido puede pasar de todo, pero lo único que no puede pasar es la intensidad que metemos al inicio del partido. Últimamente no metemos lo suficiente de cada uno para intentar ganar el partido. Luego juegas contra un rival agresivo que si te mete un gol y defiende bien es difícil. Habrá que meter más intensidad en entrenamientos, yo el primero. Hay parón de selección y a la vuelta lo tenemos que cambiar porque no podemos seguir así".

Zidane admitió que en los últimos partidos a sus jugadores les está costando "reaccionar" cuando le llegan mal dadas, y aseguró que solo el "trabajo" es el camino para poner soluciones. "Creo en el trabajo y sobre todo en la calidad del equipo. No creo que falle la actitud pero algo pasa".

"Tampoco creo que falte juego. Por desgracia, James se ha hecho daño en el calentamiento y he puesto a Mateo e Isco. No creo que nos falte juego, nos falta más intensidad y agresividad en los duelos en balones divididos", opinó.

Zidane descartó que el momento que vive sea el más duro desde que se hizo cargo del Real Madrid. "No estoy contento pero es el tercer resultado mediocre en Liga. Es un resultado bastante malo. No es mi situación más complicada, porque cuando llegué perdimos contra el Atlético e hicimos dos empates fuera de casa".

"Es un momento complicado pero no me voy a desconcentrar. Tenemos un grupo muy bueno para superar todo esto y es lo que vamos a hacer. No hay otra solución. Tenemos diez días sin los jugadores y cuando vuelvan hay que ponerse a trabajar a tope físicamente y tácticamente para ver qué podemos hacer. Hay que trabajar juntos", sentenció.