Volvió a mandar Mercedes, con Lewis Hamilton marcando el mejor tiempo de la jornada por delante de Nico Rosberg, pero la noticia en los ensayos libres celebrados ayer en el circuito malayo de Marina Bay estuvo un poco por detrás. Poco, lo que ya es noticia. Fernando Alonso establecía el quinto mejor crono en la sesión matinal con su MP4-31 sólo tras los dos Mercedes y los Ferrari de Vettel y Raikkonen, y el séptimo de la vespertina, superado también por el Red Bull de Verstappen y el Force India de Checo Pérez. La clave de la mejoría estuvo en los nuevos componentes introducidos en el motor de su McLaren-Honda, en el que estrenaba una unidad de combustión interna, el turbo, la unidad de almacenamiento de energía o el control electrónico. Esa fue la cara positiva de la noticia; la cruz, que tantos cambios le penalizarán hoy con treinta plazas en la parrilla que le llevarán a iniciar mañana el Gran Premio desde la última plaza.

Pero los tiempos de ayer, por encima del optimismo puntual, abren claramente una ventana al optimismo en el garaje de McLaren-Honda. Tanto que es posible que todas esas nuevas especificaciones Alonso se las guarde para dentro de una semana en el Gran Premio de Japón, que se disputará en el circuito de Suzuka, propiedad de Honda, para evitar a las piezas un desgaste que en Malasia será difícil rentabilizar teniendo en cuentra que se sale desde la cola del pelotón.

Pero el optimismo levantado por las pruebas de ayer también le hacen confiar a Alonso de cara a lo que pueda ocurrir mañana. Se trata de rentabilizar el castigo. Por ello el asturiano iniciará hoy la sesión clasificatoria con el único objetivo de marcar un tiempo que esté dentro del 107 por ciento que le permita tomar la salida en el Gran Premio y gastar el mínimo posible de neumáticos. Si da una única vuelta, mejor que mejor. Y mañana, en la carrera, tener el mayor número posible de juegos nuevos para "atacar sin parar", según palabras del propio bicampeón ovetense.

La batalla hoy, por tanto, quedará centrada una vez más en la lucha entre Hamilton y Rosberg por la pole; batalla que en buena lógica será la única que impere también mañana durante la carrera (9 horas, Movistar) en la lucha por el título de pilotos. Porque el de marcas ya puede quedar decidido matemáticamente a favor de los alemanes si gana uno de sus pilotos y aunque el otro ni siquiera entre en los puntos. Por su parte, Carlos Sainz (Toro Rosso) volvió a rodar en la zona media de la clasificación y finalmente no logró ingresar en el "Top 10".