Portugal lleva una década dependiendo de su estrella Cristiano Ronaldo, y cuando el triple "Balón de Oro" se agobia buscando el gol todo el equipo se contagia de su ansiedad. El jugador del Real Madrid persigue convertirse en el primer futbolista que marca en cuatro Eurocopas, un reto histórico que le obsesiona hasta el punto de dejarle en el dique seco en los dos primeros partidos de la competición.

Portugal parece haber unido su suerte a la de Ronaldo y el atacante no encuentra el camino del gol que hasta ahora le había izado al puesto de tercer máximo anotador de las Eurocopas.

Casi uno de cada dos tiros de Portugal a portería provienen de las piernas del "7", a quien el seleccionador sitúa en el puesto tradicional de "9", a diferencia del emplazamiento que ocupa en su club. El seleccionador luso, Fernando Santos, cansado de responder permanentemente a preguntas sobre su estrella, negó que Ronaldo tenga asignado un puesto y señaló que goza de libertad de movimientos porque esa es la mejor receta cuando tienes "al mejor jugador del mundo".

Pero lo cierto es que Ronaldo, que ante Austria superó a Luis Figo como el portugués con más partidos internacionales (128), dos años y medio después de haber destronado a Pedro Pauleta como el máximo goleador (58), tiene en vilo a todo el país.

La impaciencia del portugués quedó reflejada en el penalti que falló ante Austria, que estrelló en el palo izquierdo cuando el meta ya batido. El típico error de precisión que se comete cuando la concentración no está al máximo. Una imprecisión que viene siendo una costumbre. CR7 ha marrado cuatro de los últimos cinco penaltis que ha intentado, tanto con su selección como en el Madrid.

El portugués atrae toda la atención de su selección. Cada una de sus palabras es escudriñada con atención y cada frase puede provocar un terremoto. Si Ronaldo dice que Islandia tuvo una "mentalidad pequeña" por festejar el empate que sumaron ante ellos en la primera jornada, la isla nórdica estalla como un volcán. "Sus palabras explican por qué siempre está por debajo de Messi", dijo el defensa Kari Arnason. La sombra del argentino, con quien parece estar en una competición permanente, le persigue incluso en la distancia. "¡Messi, Messi!", gritaban los hinchas austríacos mientras el portugués encadenaba las ocasiones, falladas unas, detenidas por un inspirado Almer las más.

Disparar al astro enmudecido se ha convertido en un hábito en esta Eurocopa. Cristiano Ronaldo no ha marcado ningún gol de falta en competición importante con Portugal en sus últimos 36 intentos, una estadística que permitió al inglés Gary Lineker recordar que el galés Gareth Bale lleva dos goles con Gales en solo tres lanzamientos.